La Confederación Española de Centros de Enseñanza (CECE) de las Islas Baleares, que representa a 25 centros educativos concertados de las islas donde estudian 11.000 alumnos, apoya y defiende la implantación del decreto del trilingüismo que ha puesto en marcha el Govern balear.

Así lo manifiesta en un comunicado donde defiende un nuevo sistema educativo basado en el "equilibrio" de las dos lenguas oficiales, el catalán, que es "nuestra lengua propia y que lo será siempre", el castellano y la potenciación de un tercer idioma.

La presidenta de esta confederación, Magdalena Mateu, muestra en esta nota su "total acuerdo" con la nueva fórmula lingüísitica que plantea el Tratamiento Integrado de Lenguas (TIL), que se aplicará de manera gradual, recuerda.

Se trata de un proyecto muy similar al que la CECA puso en marcha en sus centros concertados desde el curso 2006-2007 y que "funciona sin problema alguno desde entonces".

Es un proyecto "muy bien acogido" por todos los padres y madres de los alumnos, que valoran la importancia del aprendizaje de las tres lenguas desde temprana edad, afirma Mateu.

Los padres son los que "realmente saben" lo que es mejor para sus hijos, añade la presidenta de este confederación, que subraya los beneficios de dominar tres lenguas.

"Desde nuestro punto de vista, el miedo al cambio está provocando esta situación de tensión que vive actualmente el sector educativo de Baleares", considera Mateu.

La CECE está convencida de que el Govern negociará con los profesores en huelga todas las cuestiones laborales que les preocupan.

La enseñanza de una tercera lengua en materias no lingüísticas, sobre todo el inglés, el tercer idioma más hablado en el mundo, es además "muy positivo" para el desarrollo intelectual de los alumnos y su proyección profesional a medio y largo plazo, destaca la CECE.

Finalmente, esta confederación recuerda que Baleares encabeza los datos de fracaso escolar del país con un 30 por ciento de abandonos, por lo que es "urgente" adoptar "medidas valientes".