Jaume Fluxá, cuya agenda de contactos con políticos de varios partidos y otros personajes influyentes, sorprendió a los investigadores del caso Bomsai, reconoció ante la Policía que cobraba el 20 por ciento de lo que se facturase por cualquier concepto gracias a sus servicios. Fluxà admitió que tiene cuentas en paraísos fiscales como Suiza o Panamá porque en España está declarado insolvente y acuciado por deudas antiguas.

Subvenciones del Consell

En su ordenado archivo los investigadores del caso Bomsai han encontrado documentos referentes a múltiples concursos públicos convocados por distintos departamentos de anteriores Governs, otras Administraciones Autonómicas e incluso el ente Aeropuertos y Navegación Española (AENA).

Fluxá también fue interrogado acerca de las subvenciones que le dio el anterior Consell de Mallorca a través de Dolça Mulet.