Tras los polémicos recortes a funcionarios, padres de recién nacidos y pensionistas anunciados el día antes por Zapatero, el pasado 14 de mayo, el presidente del Govern, Francesc Antich, desmintió que hubiera ordenado a los consellers paralizar todas las inversiones que aún no hubieran sido contratadas, así como las oposiciones todavía sin convocar, tal y como adelantó DIARIO de MALLORCA. La orden del conseller Carles Manera revela que ese día ya se habían "congelado" y "bloqueado" –usando sus propias palabras– todas las partidas del Govern para personal e inversiones. Entonces, el presidente sólo habló de "ralentizar" las obras previstas, y también negó que el Gobierno central hubiera impuesto a Balears un nuevo ahorro adicional de 170 millones en sus presupuestos para este año. Finalmente, ayer reconoció que en el último Consejo de Política Fiscal y Financiera "se ha estado hablando de 170 millones de euros" de reducción para Balears.