No me creo nada, es un mentiroso, un caradura, una vergüenza... Es la reacción de los ciudadanos a la entrevista de Jaume Matas en IB3. Ni un 25% de los encuestados se sentó a ver las explicaciones del ex president en la televisión pública. Y de los que lo siguieron, muchos cambiaron de canal. "Aguanté dos minutos escuchándole", resaltó Francisca Roca. "Es una vergüenza", opinó Susana. Leonor Sastre y Antònia Torrens tampoco tuvieron paciencia: "Apagué la tele. Es un caradura". "Me pareció una redundancia. La vi diez minutos", comentó otro telespectador.

Los ciudadanos de a pie están cansados de los políticos corruptos. Se aprecia en los comentarios de la gente que prefiere quedar en el anonimato. "Jaume Matas no nos interesa porque si lo tuviéramos delante, lo cogeríamos por el cuello", espetaron dos señoras de compras por las Avenidas.

Y de los que vieron la entrevista, la mayoría sólo tenía calificativos negativos hacia el ex líder del Ejecutivo autonómico. "No me creo nada. Soy del PP pero cuando uno es un ladrón, es un ladrón", sentenció Cati Vallori. Lo más comentado entre los ciudadanos fue la actual situación de desempleo del señor Matas. "¡Pobrecito, se ha quedado sin trabajo!", ironizó Antònia Mateu. Indignada, recordó que lamentablemente hay muchísima gente que sabe lo que es el paro. "Hay para darle dos bofetones", sentenció. "Está mintiendo", consideró Santiago Jiménez. "Que pena que no tenga trabajo, pero no lo tiene por su culpa, él solito se lo ha buscado", añadió.

Indignación y rabia transmitían las opiniones."No tuve paciencia de aguantar toda la entrevista. El ex president todo el tiempo lloraba, parecía que quería dar pena a los ciudadanos", criticó Maria Perelló. "Es una vergüenza que con la crisis que hay, Matas vaya a llorar a la televisión. Lo más bajo que hay en Mallorca, es el señor Matas. Es como una rata", opinó Nicolás Toro. ¿De dónde ha sacado los tres millones? Es otra de las cuestiones que más intriga provoca. "De donde hemos podido respondió. Yo también intento sacar dinero de donde puedo y no encuentro tres millones", sentenció Tomeu Alorda. "A la gente normal le cuesta mucho obtener un crédito para adquirir una casa para vivir y él tiene tres millones en menos de 72 horas", reprochó Maria Perelló.

Tomeu Alorda valoró muy bien a la entrevistadora, no tanto al entrevistado: "Tiene razón de que se debe respetar la presunción de inocencia pero la periodista le pedía explicaciones y él no se las dio". Ante las lamentaciones del ex ministro, Francisco Muñoz razonó que un personaje público o con una determinada posición social como Matas, lo más normal es que los ciudadanos lo juzguen sin ni siquiera haberse celebrado el juicio. ¿Le resultó creíble? "Hay cosas que sí hasta cierto punto", dijo. Su explicación es que "si en la escritura del piso de Madrid aparece un nombre que es el mismo del que paga la hipoteca, legalmente es del señor Reus". "Y si ha defraudado a Hacienda, que le interpongan una demanda fiscal", añadió. Un funcionario opinó que la entrevista fue contraproducente para él. "Cuando uno está imputado, no puede sacar ningún beneficio de salir en una entrevista televisiva". "Me parece muy mal, no entiendo de ninguna manera que vaya de víctima". Una consideración muy compartida entre la opinión pública.