El sector turístico condenó ayer enérgicamente la cadena de bombas y expresó su temor a las posibles repercusiones que pueda tener este nuevo ataque terrorista en la imagen de Mallorca de cara al exterior. Aunque hoteleros, restauradores y comerciantes quisieron lanzar un mensaje de tranquilidad, reconocieron también que las consecuencias que padecerá el sector son "impredecibles".

Para reforzar el mensaje de calma, la conselleria de Turismo del Govern remitió un comunicado a medios de comunicación de Gran Bretaña y Alemania –los principales países emisores de turistas–, así como a las oficinas de turismo en el extranjero y a las embajadas. Dicho texto se concibió para contrarrestar las posibles versiones alarmistas acerca de lo sucedido en Palma que pueden extender medios de tinte sensacionalista.

Después de condenar "de manera rotunda" esta "ola de extorsión y de terror", el presidente de la Agrupación de Cadenas Hoteleras de Balears, Aurelio Vázquez, aseguró que la repercusión que pueden tener los ataques en la temporada turística "es impredecible". "Es evidente que son noticias muy negativas, aunque en este caso no haya habido víctimas", argumentó Vázquez, quien agregó que lo único que buscan los terroristas "es amedrentar y extorsionar".

El presidente de la Agrupación de Cadenas Hoteleras de Balears mostró su confianza en la labor llevada a cabo por las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado e hizo un llamamiento a la sociedad para que colabore en la identificación de los miembros de ETA. Por su parte, el presidente de la Asociación Empresarial de Restauración de CAEB, Antoni Mas, declaró: "Esperemos que la influencia sea mínima". "No se sabe si habrá incidencia. Lo que tenemos que hacer ahora es transmitir tranquilidad. La gente está asustada y desconcertada. Pero hay que recordar que en otras ciudades, como Madrid o Londres, ha habido atentados muy graves y el turismo no se ha visto afectado", declaró Mas.

Este dirigente patronal indicó que la junta de su asociación se reunirá hoy con la conselleria de Turismo del Govern y Delegación de Gobierno para abordar la situación en que ha quedado el sector tras la oleada de explosiones. Desde el sector de los comerciantes, el presidente de Afedeco, Bartolomé Servera, consideró que estos ataques, aunque no han causado heridos, "han hecho daño" desde el punto de vista de la imagen turística.

"Más allá de que hagamos llamamientos a la tranquilidad, ahora la cosa se complica más. Será peor. Ya ha salido en todos los medios. Es diferente del anterior ataque, que fue selectivo. Esto ha sido un aviso por parte de los terroristas de ´si queremos, podemos hacer daño", apuntó.

Servera opinó que es una "mala noticia" que los terroristas "sigan ahí". "Mientras tengamos la sensación de que tienen un comando en la isla, no podremos dar esto por cerrado", dijo.

El presidente de la patronal de comercio turístico Acotur, Pepe Tirado, consideró que "sin lugar a dudas estas bombas tendrán un coste" aún no cuantificado para el sector.

"Ahora han atentado contra el turismo. Esto es muy preocupante. Nos han golpeado", señaló Tirado, quien, no obstante, quiso puntualizar: "Hay que recordar que, pese a todo, continuamos siendo un destino seguro. Nadie puede evitar este tipo de acciones. Todos tenemos que unirnos más que nunca".