Los representantes de los trabajadores de la EMT de Palma han dado la voz de alarma sobre el «riesgo» que suponen los doce autobuses eléctricos que circulan por la ciudad.

Los conductores señalan estas "deficiencias" en los autobuses: un diseño deficiente que deja un ángulo muerto a la izquierda y lo silenciosos que son, hasta el punto de que los peatones no advierten su presencia hasta que es demasiado tarde.