Con mascarillas y acicalados con una serie de adornos en el vestuario que hicieron guiños al tema sanitario, a la cuestión de género, a la monarquía o al machismo, salieron este Día de Reyes a escena los personajes de la Adoració del Reis, que este año afilaron sus lenguas para dedicarles morcillas a Francina Armengol y su salida al Hat Bar, y al rey emérito y su «fuga» a Abu Dabi. En general, no se cargaron demasiado las tintas. Tibieza en las críticas a la gestión sanitaria y en otras áreas por parte de las instituciones de las islas y de los partidos que las gobiernan. Uno de los motivos: una mayor presencia de la izquierda ideológica en el elenco.