Según explicó hoy en rueda de prensa el director de Gestión del Medio Natural de la Junta de Andalucía, José Guirado, se intentará recuperar la población de tortugas con la vista puesta en el futuro, ya que en un periodo de diez o doce años se reproducirán en el mismo lugar en el que han nacido, y los ejemplares actuarán como predadores de las medusas.

Este proceso abarca también la utilización de determinadas playas andaluzas para la anidación de las tortugas durante un corto periodo de tiempo.

"No es ciencia ficción ni va a estar mañana en ejecución", refirió Guirado, quien recordó que hace 20 años desapareció el quebrantahuesos en Andalucía y hoy hay cinco ejemplares.

La Consejería de Medio Ambiente confía en tener el próximo julio los resultados de un convenio de colaboración con el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) sobre las vinculaciones de las poblaciones de tortugas del Golfo de Guinea con las encontradas en el Mediterráneo.

La anidación de las tortugas en el litoral andaluz sería una muestra de que está bien conservado, según Guirado, quien precisó que estos animales no se reproducen en lugares con problemas de contaminación lumínica o de otra índole.

El delegado de la Consejería de Medio Ambiente en Málaga, Ignacio Trillo, apuntó que expertos de Costa Rica con los que la Junta colabora en otros aspectos ayudarán a "acelerar" este proyecto.

Ésta es una de las medidas que se incluyen dentro de la Estrategia Andaluza de Gestión Integrada de Zonas Costeras, en la que se pretende favorecer la participación ciudadana, y que deberá ser aprobada por el Gobierno andaluz, previsiblemente a finales de año.

La estrategia tiene como objetivo fijar un plan de actuación de coordinado de las administraciones sobre el suelo, agua y recursos pesqueros, entre otros.

El litoral supone aproximadamente una cuarta parte del territorio andaluz y concentra el 35 por ciento de la población, que alcanza hasta el 76,5 por ciento de los habitantes en el caso de la provincia de Málaga.

Entre los retos para la conservación del litoral también figura la implicación del sector privado, para lo que podrían articularse nuevas políticas fiscales destinadas a la recuperación de los valores ambientales y la restauración de espacios degradados, según Guirado.