Biotecnología

Crean en laboratorio los primeros embriones humanos sintéticos usando células madre

Son similares a las primeras fases del desarrollo humano y permitirán investigar trastornos genéticos

Magdalena Żernicka-Goetz, la científica que ha anunciado los primeros embriones humanos sintéticos creados con células madre, con un embrión de ratón en 2017.

Magdalena Żernicka-Goetz, la científica que ha anunciado los primeros embriones humanos sintéticos creados con células madre, con un embrión de ratón en 2017. / Lewis Houghton

Eduardo Martínez de la Fe

Eduardo Martínez de la Fe

Un equipo científico ha generado embriones humanos sintéticos utilizando células madre. Son similares a los que se encuentran en las primeras fases del desarrollo humano y podrían ser cruciales para investigar trastornos genéticos y las causas de los abortos espontáneos. Sin embargo, plantean problemas éticos y legales.

Los científicos han creado en laboratorio embriones humanos sintéticos utilizando células madre, en un avance innovador que elude la necesidad de óvulos o esperma para imitar el proceso natural del desarrollo humano temprano, informa The Guardian.

Lo ha contado la profesora polaca Magdalena Żernicka-Goetz, de la Universidad de Cambridge y del Instituto de Tecnología de California, en un discurso plenario celebrado ayer en la reunión anual de la Sociedad Internacional para la Investigación de Células Madre en Boston.

“Podemos crear modelos similares a embriones humanos mediante la reprogramación de células [troncales embrionarias]”, dijo Żernicka-Goetz en la citada reunión, según The Guardian.

Aunque todavía es pronto para valorar el alcance de esta revelación, sería la primera vez que se consiguen embriones sintéticos humanos creados mediante células madre. El año pasado se habían conseguido en ratones los primeros embriones sintéticos del mundo, también a través de “útero mecánico” (un biorreactor) a partir de células madre cultivadas en laboratorio.

Estructuras modelo

Los embriones humanos sintéticos creados ahora no tienen un corazón que late ni los comienzos de un cerebro, pero incluyen células que típicamente formarían la placenta, el saco vitelino (un nexo membranoso adosado al embrión que le proporciona nutrientes y oxígeno, a la vez que elimina desechos metabólicos) y el propio embrión, añade el diario británico.

Las estructuras modelo, cada una de las cuales creció a partir de una sola célula madre embrionaria, alcanzaron el comienzo de un hito en el desarrollo conocido como gastrulación, que ocurre cuando el embrión pasa de ser una hoja continua de células a formar distintas líneas celulares y establecer los ejes básicos del cuerpo.

Los detalles completos del último trabajo, del laboratorio de Cambridge-Caltech, aún no se han publicado en un artículo de revista. Pero, hablando en la conferencia, Żernicka-Goetz describió el cultivo de los embriones hasta una etapa un poco más allá del equivalente a 14 días de desarrollo para un embrión natural, explica The Guardian.

Límite de 14 días

Durante años, a los científicos se les ha prohibido mantener vivos los embriones humanos en sus laboratorios durante más de 14 días para evitar una maraña de problemas éticos que se plantearían al hacer experimentos con embriones humanos vivos a medida que continúan desarrollándose.

Pero según NPR, la Sociedad Internacional para la Investigación de Células Madre (ISSCR) publicó nuevas pautas en 2021 que decían que podría ser permisible estudiar embriones humanos vivos en el laboratorio durante más de dos semanas.

Sin embargo, la mayoría de las instituciones se apegan a la regla de las dos semanas para comprender el desarrollo embrionario antes de que se puedan examinar las exploraciones de embarazo y los embriones donados.

Problemas éticos y legales

Aunque el nuevo trabajo se mantenga en el margen de los 14 días, también plantea serios problemas éticos y legales, advierte el diario británico, ya que las entidades creadas en laboratorio quedan fuera de la legislación vigente en el Reino Unido y la mayoría de los demás países.

A diferencia de los embriones humanos procedentes de la fecundación in vitro (FIV), donde existe un marco jurídico establecido, en la actualidad no hay una normativa clara que regule los modelos de embriones humanos derivados de células madre, destaca James Briscoe, jefe de grupo y director adjunto de investigación del Instituto Francis Crick (Reino Unido), en declaraciones a SMC.

Los científicos implicados en este desarrollo se centran más bien en su utilidad clínica, insistiendo en que estos embriones modelo, que se asemejan a los de las primeras etapas del desarrollo humano, podrían proporcionar una ventana crucial sobre el impacto de los trastornos genéticos y las causas biológicas de los abortos espontáneos recurrentes.

Células madre y blastocitos

Por su parte, Roger Sturmey, catedrático de Medicina Reproductiva de la Facultad de Medicina de Hull York (Reino Unido) e investigador principal de Salud Materna y Fetal de la Universidad de Manchester (Reino Unido), explica, también a SMC, que el trabajo publicado en The Guardian se basa en una base de investigación cada vez mayor que demuestra que las células madre pueden, en condiciones de laboratorio muy especializadas, ser dirigidas para formar una estructura que se asemeja a la etapa embrionaria llamada blastocisto.

En el desarrollo normal, el blastocisto es una estructura importante, ya que es en torno a este momento cuando el embrión comienza el proceso de implantación en el útero y se establece el embarazo. 

Añade Sturmey que sabemos muy poco sobre esta etapa del desarrollo humano, aunque sí está comprobado que es un momento en el que se pierden muchos embarazos, sobre todo en el marco de las FIV.

Modelos de estudio

Por tanto, se necesitan urgentemente modelos que nos permitan estudiar este periodo para ayudar a comprender la infertilidad y la pérdida precoz del embarazo, algo a lo que estos embriones humanos sintéticos pueden contribuir.

Actualmente, podemos decir que estos "embriones sintéticos" comparten una serie de características con los blastocistos, pero es importante reconocer que la forma en que se forman los embriones sintéticos es diferente a lo que ocurre cuando un embrión normal forma un blastocisto, concluye Sturmey.