Una detenida se lanza de un quinto piso en los juzgados de Manacor para no ir a prisión

La joven, de 27 años, pidió permiso para ir al baño y saltó por la ventana 

Cayó sobre una cubierta de la segunda planta y sufrió lesiones muy graves

Juzgados de Manacor

Juzgados de Manacor / Sebastià Sansó

Marcos Ollés

Marcos Ollés

Una detenida se tiró anteayer desde el quinto piso de los juzgados de Manacor para evitar su ingreso en prisión. La víctima, una joven de 27 años, pidió permiso para ir al baño y eludió así a los policías que la custodiaban. Cuando se quedó sola, abrió una pequeña ventana y se precipitó al vacío. Acabó en una cubierta de la segunda planta y sufrió lesiones muy graves. Tuvo que ser rescatada por los bomberos y fue trasladada en ambulancia al hospital, donde ayer fue intervenida quirúrgicamente. 

Los hechos ocurrieron el lunes, hacia las cinco de la tarde, en el edificio judicial situado en la calle Jaume II de la capital del Llevant. La Policía Nacional había puesto a disposición del juzgado de instrucción de guardia a una joven detenida por quebrantar una orden de alejamiento de su madre. Según fuentes conocedoras del caso, la acusada mantiene un enfrentamiento desde hace tiempo con la mujer por el que ha sido arrestada varias veces y se le ha prohibido acercarse y comunicarse con ella, restricción que ha incumplido de forma reiterada.

Tras esta nueva detención, el juez de guardia sopesó decretar su ingreso en prisión preventiva o someterla a un juicio rápido y dictar una sentencia de conformidad con una pena de cumplimiento y que, por tanto, implicaba también su encarcelamiento

Según las mismas fuentes, finalmente se optó por la segunda opción con el visto bueno de la joven. Cuando esta revisaba los términos de la condena, pidió permiso para ir al baño. Los dos policías que la custodiaban la llevaron al aseo, lo revisaron y esperaron en la puerta. La detenida aprovechó entonces para subirse a la taza del retrete y abrir una pequeña ventana que da a un patio interior. Salió por allí y acabó precipitándose al vacío. Una cubierta de uralita amortiguó la caída, pero la joven sufrió lesiones muy graves y tuvo que ser hospitalizada. El juez ha prorrogado su detención a la espera de su evolución.