El TSJB rechaza repetir el juicio a Pau Rigo por matar a un ladrón e insta a dictar sentencia

La Sala de lo Civil y lo Penal del Tribunal Superior de Justicia de Baleares respaldó ayer la tesis de la defensa de Pau Rigo, ejercida por el abogado Jaime Campaner, y consideró en un auto que no procede la repetición del juicio con jurado al anciano acusado de un homicidio a uno de los ladrones que entraron a robar en su casa en Porreres en 2018. En este sentido insta a la jueza a que presidió la vista con el tribunal popular a que dicte sentencia.

En su auto, el TSJB no se pronuncia sobre si la sentencia debe ser condenatoria o absolutoria, pero sí recalca que no procede declarar la nulidad del juicio con jurado, tal y como planteó la jueza que lo presidió.

Por su parte, la defensa de Pau Rigo, de 83 años, ejercida por el letrado Jaime Campaner, interpuso un recurso contra el auto de la jueza. Este fue estimado en la resolución judicial del Tribunal Superior de Justicia de Baleares. 

La magistrada tomó la decisión de declarar la nulidad del juicio con jurado a instancia de la Fiscalía. Esta había apreciado una serie de «errores insalvables» en el objeto del veredicto, que a su juicio, impedían dictar sentencia. El ministerio público aprovechó que no se había dictado aún la resolución judicial para emitir este escrito.

En cambio Campaner sostuvo en su recurso interpuesto ante el TSJB que, tras la interpretación del veredicto y que la culpabilidad se hubiera dictado sin contar con la mayoría suficiente solo cabía, a su juicio, «una sentencia absolutoria».

 Durante el juicio celebrado el pasado mes de septiembre en la Audiencia de Palma, el tribunal popular descartó en su veredicto por unanimidad que Pau Rigo tuviera la intención de matar a Mauricio Escobar Benítez, de 25 años. Este era uno de los cuatro atracadores que entraron a robar en su finca en Porreres y que falleció después de que el anciano le descerrajara un disparo con su escopeta de caza.

El problema del veredicto del jurado se planteó poco después cuando el tribunal popular resolvió por cinco votos frente a cuatro que Pau Rigo era culpable de matar al atracador. Esta diferencia de votos es insuficiente para calificar un hecho como desfavorable para el procesado. Este requiere al menos siete votos.

En este sentido el recurso presentado por la defensa de Pau Rigo se aferraba a ese insuficiente número de votos del jurado para determinar la culpabilidad del acusado. «Si no se alcanzó el número de votos necesarios para la declaración de culpabilidad del acusado Pau Rigo, la consecuencia no puede ser otra que el dictado de una sentencia absolutoria, con todos los pronunciamientos favorables para mi patrocinado», precisa el escrito de la defensa del procesado.

Tras revocar en su auto la anulación del veredicto del tribunal popular, el TSJB rehusó valorar si la sentencia ha de ser condenatoria o absolutoria para el encausado. «Las consecuencias jurídicas del pronunciamiento absolutorio o condenatorio no derivan propiamente del veredicto, sino de la sentencia a la que sirve de soporte», precisó.

Los hechos que han dado lugar a esta controversia judicial, después del juicio con jurado celebrado en septiembre en la Audiencia de Palma, tuvieron lugar en febrero de 2018 en la casa de campo de Porreres donde residía Pau Rigo, que contaba entonces con 78 años de edad. 

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Al anciano , que había vendido recientemente una empresa de máquinas tragaperras, le habían atracado unos tres meses antes. En esa ocasión acudieron los hermanos gemelos Fredy y Mauricio Escobar, ambos de 25 años. Este último fue la víctima mortal. Acudieron acompañados por Marcos Rotger y José Luis Sánchez.

Petición de indulto

En el transcurso del atraco, Pau Rigo cogió una escopeta de caza y le disparó a Mauricio Escobar a corta distancia. Este falleció poco después y el hermano golpeó al anciano antes de emprender la huida. En el transcurso del juicio con jurado celebrado en septiembre en la Audiencia de Palma, el anciano aseguró que temió seriamente por su vida.

En su escrito de acusación, el fiscal pedía para el jubilado una pena de cuatro años de prisión por un presunto delito de homicidio. Mientras que la madre del atracador fallecido, personada en la causa como acusación particular, pedía para el acusado una pena de 15 años de prisión por un supuesto delito de asesinato. En el veredicto, el tribunal popular propuso a Pau Rigo para el indulto y declaró culpables a los otros acusados.