Agentes de la Policía Local de Llucmajor detuvieron a la primera hora de la mañana de ayer a un hombre, que se dedicaba a tirar piedras a los transeúntes. El individuo es un viejo conocido. Se trata del okupa que ha fijado su residencia en Coves de Son Verí.

El incidente ocurrieron a primera hora de la mañana de ayer. Varios viandantes llamaron a los servicios de emergencia para denunciar que un hombre se dedicaba a tirarles piedras sin ningún motivo aparente aunque no alcanzó a ninguno. Aunque por fortuna no llegó a alcanzar a ninguno. 

A continuación patrullas de agentes de la Policía Local de Llucmajor se desplazaron hasta el lugar indicado para comprobar si este sujeto mantenía su comportamiento hostil. No tardaron en comprobarlo. Uno de los policías resultó alcanzado por una de las piedras que había lanzado.

Después de tomar las correspondientes precauciones para evitar que fueran golpeados por los guijarros que arrojaba, los agentes de la Policía Local de Llucmajor detuvieron a este individuo por lesiones y atentado. Acto seguido, el arrestado fue transferido a la Guardia Civil, que se hizo cargo de él.