Vianants en Lluita manifesto el domingo "su impotencia e indignación" ante el hecho de que Palma "siga siendo tan profundamente hostil para quienes caminan por ella" un día despues de que se conociera la noticia del fallecimiento de un joven ciudadano arrollado por un autobús de transporte público. En este sentido, la entidad criticó que "se culpe a las víctimas de su muerte o lesiones", cuando a su juicio quien causa el riesgo es el tráfico motorizado, "y es del todo lógico que el que puede dañar debe ser quien debe extremar la cautela, y no al revés, como perversamente se mantiene desde hace muchos años".

La asociación advirtió en un comunicado de la insuficiencia de los controles de velocidad en el ámbito urbano. "Somos testigos a diario de conductas irracionales y homicidas en conductores de automóviles y motocicletas, especialmente las de gran cilindrada, y tenemos por cierto que el porcentaje que de ellas se sanciona es ínfimo", remarcó.

Vianants en Lluita llamó también a la reflexión sobre las actitudes de conductores de vehículos de transporte público, que según remarcó "en ocasiones no se avienen a las prácticas de precaución que deben presidir el manejo de vehículos de tanta masa y volumen". La entidad advierte de muchas conductas de estos trabajadores "potencialmente peligrosas", entre las que destaca "atravesar los pasos regulados por semáforos con la luz en ámbar o manifiestamente en rojo".

"Probablemente esas prácticas vengan inducidas por grados de exigencia en el cumplimiento de horarios que no se corresponden con la realidad de un tráfico congestionado", ha detallado Vianants en Lluita, quien lamentó "que no se tiene la valentía de actuar a fondo, adoptando medidas que, gradualmente reduzcan la ventaja injusta que supone el abuso de medios de transporte individual motorizado, insostenible e insolidario con la ciudad y con el planeta". Así, según lamentó, la congestión aumenta, "en detrimento del atractivo del transporte público".

La entidad criticó además el abuso de los vehículos motorizados particulares, "transportando en muchísimos casos a una sola persona mediante estructuras metálicas 20 veces más pesadas que el pasajero que acogen", lo que a su modo de ver supone "un verdadero despropósito, un insulto a la inteligencia y una muestra de irracionalidad profunda y suicida".

En este sentido, recordó que muchas ciudades están adoptando medidas encaminadas a modificar la proliferación de vehículos, "y nosotros echamos de menos que en la nuestra no se asuma decididamente esa necesidad".

Vianants en Lluita ha asegurado que seguirá reivindicando "una ciudad amable para con las personas", y ha advertido de que si no se logra este objetivo,"se nos está expropiando injustamente el derecho a disfrutar de ella" y además el futuro de la ciudad quedará "comprometido".