"A las siete de la tarde del lunes lo vi en el huerto, junto a su casa. Yo ya me iba y le saludé, pero él no me vio. Estaba arreglando las tomateras, en la parte de atrás de la finca, justo al lado del ´safareig´", recuerda Rafel, vecino de Juan Antonio Florit, el hombre asesinado en una casa de campo en el Camí de Son Creixell, a las afueras de Sencelles. Conocía bien a la víctima. Además de vecino al tener una finca al lado de la suya, es familiar. "Yo soy primo del padre del fallecido", aclara.

Rafel fue una de las últimas personas que vio con vida a Juan Antonio Florit, ya que poco después fue atacado de forma brutal dentro de la vivienda presuntamente por su exyerno. "Yo no conozco al acusado, no sé quién es, no lo he visto por aquí", destaca el testigo.

"Esta zona es muy tranquila, a veces pasan coches o alguna moto por el camino, pero todo esto es muy tranquilo. El lunes por la tarde no vi nada extraño ni tampoco vi a ese hombre", indica el vecino, mientras señala hacia la propiedad del fallecido. Ayer por la mañana, dos puertas del inmueble estaban precintadas por la Policía Judicial de la Guardia Civil. En el acceso principal a la finca también figuraba un cartel con la orden de precinto de los investigadores. La pequeña construcción donde se produjo el crimen entre la tarde y la noche del lunes está rodeada de un frondoso jardín muy bien cuidado con muchos árboles. Bajo una sombra, permanecía estacionado el coche de la víctima.

"Él bajaba cada noche a Palma porque se quedaba a dormir con sus padres, ya que son mayores. Antes de salir con el coche, siempre llamaba a su madre y la avisaba para que estuviera tranquila", prosigue el testigo.

Rafel, vecino de la víctima. B.P.

La noche del lunes ya no llamó al domicilio. Posteriormente, su familia trató de contactar con Juan Antonio Florit a lo largo del martes, pero les fue imposible. A las nueve y cuarto de la noche del martes, una hermana del fallecido alertó al 112 al descubrir el cuerpo del hombre sobre un gran charco de sangre.

La Guardia Civil inició entonces una exhaustiva investigación, ya que el hombre había sido golpeado, degollado y acuchillado durante un intenso forcejeo en el que trató de defenderse e interpuso sus brazos y manos ante las puñaladas que le asestaba su atacante. El jueves por la tarde, la Policía Judicial arrestaba al presunto autor del crimen: Antonio B.F., de 40 años, su exyerno.