Un hombre albanés encarcelado desde octubre por desvalijar un centenar de viviendas en Calvià ha sido acusado ahora de otros 31 robos en chalés de Palma. El sospechoso forma parte de la conocida como 'banda del taladro', desmantelada por la Guardia Civil tras una frenética actividad durante el pasado verano. Tras la operación del instituto armado, en la que fueron detenidas tres personas, la Policía Nacional comprobó que uno de los detenidos era el autor de decenas de robos en zonas de la capital como Son Vida y La Bonanova. El delincuente actuaba siempre mientras los moradores dormían y, según las pesquisas, drogó a algunas de las víctimas para evitar ser descubierto.
La Policía Nacional llevaba más de tres años tratando de identificar y localizar a este sospechoso. Durante los veranos de 2013, 2014 y 2015, los agentes del grupo de Robos recibieron una treintena de denuncias por delitos cometidos en viviendas con un mismo modus operandi. Los ladrones abrían un agujero en alguna ventana con un taladro u otra herramienta similar para conseguir acceder al interior. Una vez dentro, se llevaban todos los efectos de valor que hubiera, tanto joyas como aparatos electrónicos y dinero en efectivo.
Cámara de seguridad
Estos robos se sucedieron durante varios veranos, entre 2013 y 2015. La mayoría de ellos se produjeron en la exclusiva urbanización Son Vida, aunque también se registraron algunos en la calle Francesc Vidal i Sureda, en La Bonanova. Los intrusos accedían a los domicilios de madrugada, mientras los moradores estaban durmiendo. Algunas de las víctimas explicaron que tras los robos despertaron con fuertes dolores de cabeza y malestar. La Policía sospecha que fueron drogados o rociados con alguna sustancia para mantenerlos aturdidos y evitar que opusieran resistencia. Los investigadores contaban con la imagen de un ladrón, captada en el año 2014 por la cámara de seguridad de uno de los chalés en los que actuó. Esta pista, sin embargo, no dio frutos.
Durante el pasado verano se sucedieron en Calvià decenas de robos cometidos con el mismo procedimiento. La Policía Judicial de la Guardia Civil asumió las pesquisas sobre esta oleada de asaltos, cometidos en viviendas de lujo de Costa de la Calma, Costa d'en Blanes y Bendinat. A principios de octubre, la investigación desembocó en la detención de tres personas, dos hombres albaneses y una mujer ecuatoriana, por su presunta participación en el centenar de robos cometidos a lo largo del verano. Los dos varones ingresaron en prisión preventiva por orden judicial y uno de ellos admitió su implicación en los delitos y colaboró con los agentes encargados del caso.
Estos arrestos permitieron a la Policía Nacional comprobar que uno de los hombres encarcelado guardaba una gran parecido físico con el sospechoso captado por una cámara en 2014. Las gestiones posteriores han permitido confirmar ahora su participación en los asaltos cometidos en Son Vida y La Bonanova. Está acusado de 31 robos con fuerza perpetrados en estos puntos de Palma desde el año 2013, además del centenar que ya se le imputaban en Calvià.
Fuentes de la Policía Nacional explicaron ayer que por el momento no hay constancia de que el otro miembro de 'la banda del taladro', también encarcelado desde el pasado mes de octubre, participara en los robos investigados en Palma.
