Dos domicilios de Marratxí habían sido habilitados como un invernadero para el cultivo de marihuana a gran escala. La Guardia Civil detuvo a tres personas por un presunto delito contra la salud pública y defraudación de fluido eléctrico e intervinieron 130 plantas.
Los efectivos del Instituto Armado del Pont d'Inca activaron la pasada semana la denominada 'Operación Power Flower'. El elevado consumo eléctrico fraudulento en dos domicilios de Marratxí puso tras la pista que las viviendas podrían haber sido reconvertidas en criaderos de marihuana.
Las sospechas se vieron confirmadas al hacer efectiva la orden de entrada y registro en los dos domicilios. Los agentesde la Guardia Civil se encontraron en el interior 130 plantas de marihuana en diferentes etapas de desarrollo, 500 gramos de la misma sustancia dispuesta para su venta y 110 gramos de hachís.
Asimismo, los investigadores del Instituto Armado se encontraron en los dos domicilios gran cantidad de dinero en efectivo, en billetes fraccionado. En la vivienda contaban los traficantes con material electrónico, básculas de precisión y diversos efectos utilizados para el cultivo, elaboración y distribución de las sustancias estupefacientes.
La Guardia Civil les intervino también dos coches de gama alta y una motocicleta. Los puntos de venta de la droga eran Marratxí y Punta Ballena, en Magaluf.
