Un hombre aceptó ayer tres años de prisión por dar una brutal paliza a su novia y dejarla encerrada bajo llave e incomunicada en su domicilio de Palma durante 15 horas. La víctima fue rescatada por la Policía después de que un vecino encontrara dos notas de auxilio que había tirado por la ventana. El acusado reconoció los hechos y se conformó con la pena al alcanzar un acuerdo con la fiscalía, que rebajó su petición inicial de siete años de cárcel al aplicar las atenuantes de reparación del daño y toxifrenia.

El procesado, de 34 años, admitió que a las cuatro de la madrugada del pasado 22 de enero se dirigió a su vivienda en compañía de su novia. La pareja se enzarzó en una discusión, durante la cual el hombre agarró con fuerza a la mujer por el cuello y la tiró al suelo. Cuando la víctima cayó, le cogió la cabeza y la golpeó contra el piso, tras lo que le dio varias patadas y puñetazos por todo el cuerpo. Cuando la mujer intentó defenderse, el acusado le propinó un mordisco en un dedo. Durante la agresión, la perjudicada se acercó a la ventana para tratar de pedir ayuda, pero el hombre se lo impidió agarrándola por el cuello. Luego la arrastró por la casa y acabó lanzándola contra una pared.

El hombre cerró la puerta del domicilio con llave, desconectó los teléfonos para impedir que ella pudiera contactar con alguien y se encerró con ella en el salón, diciéndole varias veces que tenía ganas de seguir pegándole. La mujer permaneció en esta situación durante 15 horas, hasta las siete de la tarde, cuando fue liberada por la Policía. La víctima aprovechó que el agresor se había quedado dormido para lanzar dos notas de auxilio por una ventana. Un vecino las encontró y alertó a los agentes, que acudieron a la vivienda y arrestaron al sospechoso. Desde entonces, está encarcelado.

La mujer sufrió, a consecuencia de la paliza recibida, contusiones y hematomas en el labio, el mentón, la mejilla, la sien, los brazos, el omóplato, las rodillas y un dedo.

La fiscalía acusaba inicialmente al acusado de un delito de malos tratos y otro de detención ilegal, por los que reclamaba uno y seis años de prisión respectivamente.

Notable rebaja

El sospechoso fue excarcelado ayer y compareció ante el tribunal de la sección segunda de la Audiencia Provincial. El hombre admitió los hechos y se declaró culpable tras llegar a un acuerdo de conformidad con la fiscalía. El ministerio público aplicó una notable rebaja a su petición inicial al apreciar como atenuantes que el sospechoso fuera adicto a las drogas cuando ocurrieron los hechos y que haya indemnizado a la víctima por las lesiones que le causó y las secuelas que padece.

El procesado fue finalmente condenado a un año de prisión por los malos tratos y a dos por haber retenido a la mujer, a la que además no podrá acercarse durante los próximos cinco años.