La Audiencia Provincial ha confirmado la condena a dos adolescentes que dieron una paliza a otro para robarle 35 euros en Palma. Los acusados y la víctima habían discutido por el reparto de un premio obtenido en una máquina tragaperras. A la salida del local, los procesados propinaron a la víctima patadas en la cara y golpes por todo el cuerpo. El perjudicado sufrió graves lesiones, por las que los agresores deberán indemnizarle con más de 2.600 euros.
Los hechos, según la sentencia del juzgado de menores número 1 de Palma, ocurrieron poco después de la medianoche del 21 de abril de 2011 en la plaza Barcelona. Un grupo de adolescentes se enzarzó en una discusión en el interior de un salón de juegos tras obtener un premio y no ponerse de acuerdo sobre cómo debían repartírselo. La pelea subió de tono y el encargado del local acabó expulsándolos.
La riña continuó en la calle. Allí, según el fallo, uno de los menores se dispuso a meter en su cartera los 35 euros en monedas que había ganado. Fue entonces cuando uno de sus acompañantes le dio un golpe en la mano y el dinero quedó esparcido por el suelo. Cuando la víctima se agachó para recogerlo, recibió una patada en la cara y cayó, tras lo que recibió una lluvia de golpes. Los dos agresores le quitaron los 35 euros y se marcharon.
El perjudicado sufrió una herida abierta en la cara, cervicalgia, herida inciso contusa con pérdida de sustancia en la frente y un corte en el labio por el que precisó varios puntos de sutura. Tardó diez días en recuperarse y como secuela le quedaron cicatrices en la frente y la comisura labial, según el fallo, que absolvió a otro menor al no quedar probada su implicación en los hechos.
Por estos hechos, el juzgado de menores condenó a dos adolescentes por delitos de robo con violencia y lesiones y les impuso sendas condenas de dos años de libertad vigilada. Además, les ordenó indemnizar a la víctima con 297 euros por las lesiones, 2.361 por las secuelas y 35 por el dinero que le sustrajeron.
La defensa de uno de los condenados recurrió la sentencia ante la Audiencia Provincial. Según alegaba, la agresión se produjo en dos momentos diferentes y en ella participaron más personas, mayores de edad, por lo que no podía determinarse que las lesiones sufridas por la víctima fueran fruto de los golpes que le dieron los menores. El tribunal de la sección segunda ha rechazado el recurso y confirmado la sentencia.
