La Paca quiere volver a casa. Francisca Cortés Picazo, la conocida matriarca de Son Banya, ha pedido cumplir el resto de la condena que aún tiene pendiente en la prisión de Palma. La famosa cabecilla de uno de los clanes más poderosos del poblado se encuentra encarcelada en la actualidad en Alicante, en el centro penitenciario de Villena. La mujer, que lleva presa desde el verano de 2008, ha solicitado a Instituciones Penitenciarias que la trasladen a Mallorca, cerca de los suyos. Alega razones familiares y de arraigo, ya que no tiene a ningún pariente que viva cerca de Alicante, lo que hace más difícil que reciba visitas de sus allegados.
La Paca ya ha cumplido un tercio de la condena por el caso Son Banya, que el Tribunal Supremo rebajó de 22 a 16 años de cárcel por cuatro delitos de detención ilegal, cohecho y falso testimonio tras sufrir un robo millonario en el poblado. En este procedimiento también fue sentenciado el exinspector de la Policía Nacional, José Gómez, Pepote, por pedir un soborno a la matriarca. De los 16 años que le impuso la sala, Francisca Cortés ya lleva entre rejas cinco y medio. Ha pasado por las celdas de distintas ciudades españolas: Palma, Valencia, Zaragoza y, ahora, Villena (Alicante).
En un principio, estuvo acompañada durante los primeros años de reclusión por su hija, La Guapi, pero esta ya ha salido libre. La mayoría de sus familiares sentenciados ya están en la calle, a excepción de su hermano Isidro, alias El Moreno, quien todavía cumple condena. El Moreno está preso en Palma, tras conseguir que lo trasladaran a la isla desde Castellón.
Francisca Cortés quiere, igual que su hermano, regresar a Mallorca, donde vive la mayor parte de sus parientes. La matriarca alega que está sola en Alicante y que cada vez que su familia viene a verla eso les supone una elevada carga económica. Por ello, ha pedido su traslado a Instituciones Penitenciarias.
El hecho de que haya cumplido con creces la cuarta parte de su condena le favorece a la hora de empezar a solicitar los primeros permisos penitenciarios. Sin embargo, podría ocurrirle como a su hijo, El Ico, quien cumplió íntegro el fallo al ser considerado como un FIES (Fichero de Internos de Especial Seguimiento) al ser catalogado como un preso peligroso y como delincuencia organizada, lo que le perjudicaría. El Ico, que ya está libre, no obtuvo ningún permiso penitenciario durante el cumplimiento total de su condena.
La Paca lleva presa desde que estalló la operación antidroga Kabul, en julio de 2008. Por este macroproceso fue absuelta al declararse nulos los pinchazos. La sentencia del caso Kabul aún no es firme. La matriarca no salió de la cárcel porque había recaído sobre ella una contundente condena por el caso Son Banya. Aún tiene pendiente la operación Musaraña, que trata de aclarar el origen de 4 millones de euros hallados enterrados en un zulo en el poblado.
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