Una reclusa sufre quemaduras de segundo grado al incendiarse el colchón de su cama del módulo de presos de Son Espases donde estaba ingresada. La mujer tiene afectado el 15 por ciento de su cuerpo y permanece en observación en el centro sanitario.

El incidente se produjo sobre las 18.55 horas del lunes en la planta 3-O de Son Espases. La alarma antiincendios detectó un fuego en el módulo de presos. Un total de 21 pacientes tuvieron que ser desalojados de sus habitaciones, según informó la conselleria de Salud. Entre estos se encontraban seis presos, que estaban custodiados por agentes de la Policía Nacional.

La herida más grave fue una reclusa de mediana edad que sufrió quemaduras en el 15% de su cuerpo. En un primer momento se temió que las lesiones pudieran ser de tercer grado, aunque una nueva valoración la redujo a segundo grado, según informaron fuentes sanitarias. Los primeros indicios apuntan a que esta interna pudo ser la causante del fuego en el módulo de presos de Son Espases. No obstante la Policía Científica y la Policía Judicial del Cuerpo Nacional de Policía ultiman la investigación para tratar de determinar con exactitud cómo se inició el fuego en el centro sanitario.

Esta interna fue trasladada el pasado domingo desde el Centro Penitenciario de Palma hasta el hospital Son Espases aquejada de graves problemas respiratorios. Cumplía condena por robo con violencia y tráfico de drogas. Tras tres años en prisión, aún tenía pendiente un año más en la cárcel.

El módulo de presos de Son Espases consta de siete habitaciones. El fuego en un colchón se propagó con suma rapidez y hubo que evacuar a los reclusos que estaban allí ingresados. Otros 15 pacientes que no se encuentran en régimen penitenciario también fueron desalojados como medida de precaución. Nada más detectarse el fuego, el hospital Son Espases activó el protocolo establecido para estos casos. Los 21 pacientes desalojados fueron reubicados en otras habitaciones del centro sanitario.