La Policía Nacional no afloja en Son Banya. La Brigada de Seguridad Ciudadana mantenía ayer el cerco al poblado con controles en los accesos las 24 horas del día como respuesta al perdigonazo que recibió un agente en el cuello el pasado miércoles cuando se retiraba tras una operación antidroga, mientras continúan las pesquisas para dar con el autor del disparo. Los siete miembros del clan de ´La Burra´ detenidos en este operativo contra el narcotráfico, a los que se incautó 250 gramos de cocaína, 121 papelinas de heroína, 20 kilos de marihuana y 3.000 euros, pasaron ayer tarde a disposición judicial.

El blindaje en la entrada al poblado es total y continuo. Cualquier vehículo que quiera entrar o salir de Son Banya es inspeccionado y sus ocupantes, identificados. Desde que los agentes se desplegaron en la zona el jueves a mediodía, como adelantó DIARIO de MALLORCA, han levantado más de 25 actas por tenencia de estupefacientes tras incautar pequeñas cantidades de droga. Además, se han detectado muchas irregularidades en la documentación de los vehículos examinados, como falta de seguro o de ITV. La Policía Local, que también ha enviado a una patrulla al poblado, ha tramitado numerosas denuncias y retirado los automóviles con la grúa municipal. También se han detectado conductores que circulaban sin carné y hay al menos un detenido por un delito contra la seguridad vial.

Ayer, una quincena de efectivos de la Unidad Motorizada y la Unidad de Prevención y Reacción, continuaban realizando los controles en la zona. La Policía Nacional mantendrá el dispositivo de forma indefinida, como ya hizo en 2007 tras un incidente similar durante una redada en el poblado que acabó desembocando en graves incidentes con los vecinos de Son Banya. Los agentes siguen intentado aclarar quién disparó al policía el pasado miércoles.