Una operación conjunta de la Policía Local de Palma y la Policía Nacional permitió descubrir ayer por la mañana unas 400 plantas de pequeño tamaño en el interior de un domicilio de la calle Fe, en la barriada de La Soledad. La planta baja estaba especialmente acondicionada para el cultivo de cannabis a gran escala, con sistemas de ventilación e iluminación y un enganche ilegal al tendido eléctrico, de lo que se desprende que el lugar podría llevar bastante tiempo siendo utilizado para la producción de esta droga.

Las pesquisas fueron desarrolladas por agentes del Grup d´Investigació i Seguiment de Denúncies (GISD) de la Policía Local de Palma y del Grupo de Estupefacientes de la Policía Nacional. Los policías recibieron informaciones que apuntaban a la existencia de un centro de producción de marihuana en el interior de una planta baja de la calle Fe, en La Soledad.

Los investigadores realizaron vigilancias sobre las casa durante dos meses, lo que les permitió confirmar que no vivía nadie allí, aunque había al menos una persona que acudía al lugar, presumiblemente para realizar los trabajos de cultivo de las plantas.

Finalmente se solicitó una orden judicial de entrada y registro en el domicilio, que llevaron a cabo ayer por la mañana.

Ante la posibilidad de que se encontraran con alguna oposición en el interior del domicilio, se movilizaron también a dos equipos de la Unitat d´Intervenció Immediata (UII) de la Policía Local. Los dos furgones, con una decena de agentes, permanecieron apostados en la cercana calle Puerto Rico, en el Polígono de Levante, hasta que se procedió a allanar el inmueble.

Los UII colocaron sus furgones en los extremos de la calle Fe para evitar cualquier intento de fuga, mientras que los agentes de Estupefacientes y del GISD forzaban el acceso e irrumpían en el domicilio acompañados por una comisión judicial.

En el interior de la planta baja encontraron unas 400 plantas de marihuana en un estadio temprano de crecimiento, con unas instalaciones especialmente acondicionadas para facilitar el cultivo. Las estancias contaban con un sistema de ventilación e iluminación para potenciar el rápido desarrollo de las plantas.

Los responsables del invernadero habían colocado un enganche ilegal a la red eléctrica. De esta manera se ahorraban elevadas facturas por la gran cantidad de energía que consume este sistema, y pasaban desapercibidos en las inspecciones.

Los agentes fueron acompañados por técnicos de Endesa que confirmaron estas instalaciones ilegales, por lo que los responsables del invernadero serán acusados de un delito contra la salud pública y otro de defraudación de fluido eléctrico.

Ayer por la mañana no se había producido ninguna detención por este caso, si bien los investigadores seguían realizando gestiones para localizar a los responsables de la plantación.