El C-5 Galaxy, el avión más grande del ejército norteamericano, que el pasado martes tuvo que aterrizar de emergencia en Palma abandonó la isla el mismo día tras ser reparado. Los ingenieros que viajaban a bordo del aparato lograron solventar la avería en pocas horas y hacia las cuatro de la tarde el avión despegó desde Son Sant Joan.
La aeronave volaba desde la base turca de Incirlik a la de Morón de la Frontera (Sevilla) cuando uno de sus cuatro motores se paró. Los pilotos solicitaron autorización para realizar un aterrizaje de emergencia en Son Sant Joan, por lo que se activó un dispositivo en el que participaron los bomberos de AENA y la Guardia Civil. El avión, en el que viajaban 58 personas, tomó tierra con normalidad.
