La Policía Local de Palma detuvo el sábado a un joven por un presunto delito de atentado y otro de conducción temeraria después de que intentara arrollar con su coche a dos agentes motorizados. Además conducía sin seguro y sin haber pasado la ITV.

Los hechos ocurrieron sobre las tres y media de la tarde del pasado 19 de marzo. Los agentes reparan en un Volkswagen Golf blanco sospechoso con tres individuos dentro. Al pasar sus datos por el ordenador, se percatan de que no tiene suscrito el seguro obligatorio ni ha pasado la Inspección Técnica de Vehículos.

Cuando los policías tratan de interceptarle, el conductor sospechoso emprende la huida. Dos agentes motorizados le salen al paso en el Paseo de Sagrera. En lugar de detenerse, apretó a fondo el acelerador. Intentó atropellar a uno de ellos y pasó rozando al segundo. Solo lograron evitarlo saltando a un lado.

A continuación se inició una persecución. El conductor puso en peligro la integridad de peatones. Los agentes les hicieron señas para que se apartaran y no ser arrollados.

Finalmente, el sospechoso huyó, pero su coche lo encontraron en la calle Felip Bauçà. Tras intervenirlo fueron a su domicilio. El autor no se encontraba. Fue detenido días después tras ser citado en el cuartel de Sant Ferran.

Por otro lado, un motorista ebrio fue arrestado el sábado tras increpar a los ocupantes de un coche sin percatarse de que se trataba de policías de paisano. Tocó el claxon e hizo ademanes amenazantes. Al apearse de la moto, los agentes le hicieron la prueba de alcoholemia. Fue detenido después de dar una tasa de 0,72.