La Policía Nacional se ha incautado de 2.500 euros procedentes de apuestas clandestinas y diversa documentación y material con el que se realizaban partidas clandestinas de juegos de azar en un bar de Manacor.
La Policía consiguió intervenir documentación sobre las ganancias y pérdidas de la banca y la de jugadores con alusiones a sus cuentas bancarias, y el dinero procedente de las apuestas ya realizadas, además de barajas españolas, americanas, series de dados, una mesa con atril de metacrilato y otra de póquer habilitada para el juego de cartas.
Según ha informado la policía en un comunicado, el dinero que se generaba cada día de forma ilegal oscilaba entre los 5.000 y los 15.000 euros, con una ganancia para los organizadores de entre 200 y 2.000 euros diarios.
Por su parte, los jugadores podían llegar a perder grandes cantidades de dinero, y en algunas ocasiones, hasta rebaños de ganado.
Con esta operación, denominada, Daus de Ferro, se ha constatado, por primera vez en Baleares, que tras las pérdidas iniciales de dinero en efectivo, se realizan pagos a través de transferencias bancarias para seguir jugando.
Las investigaciones realizadas por funcionarios del Servicio de Control de Juegos de Azar de la de la Jefatura Superior de Policía en Illes Balears constataron la afluencia de numerosas personas en un bar de Manacor que acudían con la predisposición de participar en partidas de cartas "Monte" y de dados "tiro por siete", los juegos más populares de la zona.
Tras obtener la orden de entrada e inspección del local, custodiado por una persona que controlaba el acceso al local a través de una puerta de hierro macizo, sobre las 17:30 horas del pasado sábado funcionarios de la brigada de juego y agentes de la Comisaría de Manacor entraron y localizaron en el interior del bar a once personas, de las cuales nueve jugaban al "Monte".
Tras la intervención policial, el jugador que hacía de banquero intentó quemar documentación para evitar que la policía tuviera acceso a ella y en un descuido también arrojó al fuego dinero en efectivo.
Algunos jugadores que conocen las redadas policiales contra el juego ilegal solían ocultar el dinero en los calcetines o zapatos, o sus vehículos, ha añadido la Policía.
