­La Audiencia Provincial de Palma inició ayer el juicio contra un asesor fiscal de la ciudad, acusado de un delito continuado de apropiación indebida y otro de falsedad documental, por quedarse con miles de euros de una veintena de clientes. El economista imputado se enfrenta a una petición de pena de seis años de prisión por parte de la fiscalía, así como su inhabilitación para el ejercicio de la profesión de asesoría fiscal, económica y contable durante el tiempo de la condena.

Según el escrito de acusación del ministerio público, el sospechoso ha reconocido todos los hechos e incluso consignó 70.000 euros a cuenta de las indemnizaciones que se le solicitan. El hombre admitió ayer los hechos, pero no estuvo conforme con la pena que se le reclama ni con la calificación de los delitos. Su letrado considera que se deben apreciar las circunstancias atenuantes de ludopatía y obesidad mórbida.

Según la acusación, el economista abusó de la confianza y de las relaciones personales existentes entre las partes y se aprovechó de su credibilidad profesional. El asesor fiscal supuestamente se apropió indebidamente de las cantidades que recibía de una veintena de clientes, cuyo destino debía ser el pago de impuestos o tributos de IVA, IRPF, patrimonio, sucesiones y transmisiones. Además, el imputado también falsificaba o manipulaba documentos y facturas y supuestamente se hizo suyas distintas provisiones de fondos, según la acusación.