La Guardia Civil de Tráfico se movilizó ayer por la tarde tras recibir varios avisos sobre un coche que circulaba en sentido contrario por la carretera de Manacor, a la altura del cruce de Petra. Las patrullas recorrieron la zona y no localizaron nada irregular, y tampoco se recibieron nuevas llamadas, por lo que se suponía que el conductor se había metido en contradirección por error y había salido en la primera ocasión.
Las llamadas llegaron al 112 y a la central de la Guardia Civil de Tráfico poco antes de las cuatro de la tarde. Se trataba de conductores que se habían cruzado con un vehículo que circulaba en sentido contrario por la carretera de Manacor, a la altura del cruce de Petra. Según indicaron, era un Volkswagen Golf blanco ocupado por una pareja de apariencia extranjera.
Los conductores que llamaron estaban muy asustados, porque se habían cruzado con el vehículo de forma imprevista en una vía desdoblada donde se puede circular a cien kilómetros por hora.
La Guardia Civil movilizó a varias de sus patrullas, que recorrieron la vía en los dos sentidos, pero no localizaron el coche ni detectaron ninguna situación irregular. Tampoco se recibieron nuevas llamadas de alerta, por lo que los guardias civiles pensaban que se trataba de un conductor que se había despistado y, tras darse cuenta, salió en cuanto pudo.
