La Policía Nacional ha culminado la segunda fase de la "operación Nancy", en la que fue desarticulada una banda que prostituía a menores a cambio de droga en Palma, con la detención de cuatro hombres, presuntos clientes, que habrían tenido relaciones sexuales con las chicas. Todos están acusados de delitos de prostitución y corrupción de menores, y a uno de ellos se le imputa además tráfico de drogas, ya que habría pagado algunos de los servicios sexuales con estupefacientes.
Fuentes de la Policía Nacional informaron de que tras la primera fase de la "operación Nancy", en la que fueron detenidas ocho personas en Palma acusadas de suministrar a chicas menores de edad para, una vez enganchadas, forzarlas a prostituirse, las investigaciones se centraron en los clientes de la banda.
Fruto de estas pesquisas fueron identificados cuatro hombres, todos ellos subsaharianos, que habrían contratado los servicios sexuales de las menores.
Uno de estos hombres está actualmente preso en Barcelona, tras ser detenido por los Mossos d´Esquadra en una operación antidroga. Los agentes de la Policía de Palma solicitaron su excarcelación para tomarle declaración por estos hechos.
Los otros tres sospechosos fueron arrestados el pasado lunes en Palma, y está previsto que hoy pasen a disposición judicial. Todos ellos están acusados de valerse de la organización desarticulada para mantener sexo con las menores. Uno de ellos habría pagado los contactos sexuales con droga, por lo que se le acusa además de tráfico de estupefacientes.
La banda desarticulada en la "operación Nancy" a principios de mayo presuntamente captaba a chicas menores en los alrededores de institutos de Palma. Les facilitaba droga y, una vez se convertían en adictas, las forzaba a prostituirse a cambio de sustancias estupefacientes. Los investigadores descubrieron que había al menos seis víctimas, entre ellas una chica con una minusvalía psíquica. La Policía encontró vídeos de contenido sexual grabados a las menores.
