El restaurante de Palma Moga 90 cierra sus puertas

El establecimiento clausura una trayectoria de más de tres décadas de buena cocina en Mallorca

Víctor Garrote, del restaurante Moga 90

Víctor Garrote, del restaurante Moga 90 / DM

Bartomeu Font Sbert

Bartomeu Font Sbert

El restaurante Moga 90 de Palma finaliza una etapa de servicio y amor por la cocina que ha durado 34 años. Así lo ha anunciado Víctor Garrote, su propietario, que pone punto y final a este negocio familiar. 

La aventura de Moga 90 empezó el 2 de febrero de 1990. Lo abrieron el matrimonio formado por Manuel Garrote y Celia Carboneras junto a Alberto Molina. Su misión consistía en ofrecer frituras, tapas y embutidos de calidad en la barriada del Camp Redó de Palma, concretamente en la carretera de Valldemossa, que en aquellos momentos vivía un boom de construcción de casas.

Con el cambio de milenio, Víctor Garrote Carboneras entró a formar parte del negocio, aportando nuevas propuestas a las habituales. Así, organizó jornadas gastronómicas e impulsó platos varios como el cocido, plato sano y sabroso que desgraciadamente casi ha desaparecido de las cocinas de los restaurantes, y los huevos fritos con bogavante.

Moga 90 cerrará sus puertas el domingo 3 de marzo y este viernes, día 1, celebrará una fiesta con amigos, familiares y parroquianos. Víctor Garrote explica que está muy orgulloso de la labor que sus padres y él han lelvado a cabo: "Han sido años de mucha lucha, sacrificio y, también, de mucha recompensa porque hemos creado una gran familia y nos hemos hecho un nombre en el sector de la restauración de Palma".

Garrote ha decidido traspasar el local y disfrutar de un tiempo de descanso. Ahora bien, no cierra la puerta a abrir otro negocio relacionado con el ocio y la restauración.