Salud mental

Los intentos de suicidio con fármacos en la Comunidad Valenciana se duplican en adolescentes de 11 a 15 años

Un tercio de las intoxicaciones voluntarias en los últimos dos años, sobre todo con antidepresivos y ansiolíticos, son de menores de 20 años con predominio de las mujeres

La Comunidad Valenciana es la segunda con más casos tras Andalucía y por delante de Madrid y Cataluña. Más del 50% de las personas con trastorno mental no reciben tratamiento

Pintada sobre el suicidio en Alicante.

Pintada sobre el suicidio en Alicante. / ALEX DOMÍNGUEZ

J. Hernández

Los intentos de suicidio por ingesta voluntaria de fármacos atendidos por el Servicio de Información Toxicológica han subido en los dos últimos años un 30% pero, en la población de 11 a 15 años, la cifra se ha duplicado, "con claro predominio de las chicas". La autonomía con mayor tasa en general es Andalucía (24,4%), seguida de la Comunidad Valenciana (15,9%), Madrid (12,6%) y Cataluña (11,9%).

"Algo está pasando con nuestra población adolescente", alertó el responsable de este servicio, José Luis Conejo, durante la jornada "La importancia del dato en el análisis y prevención de la conducta suicida", organizada por el Ministerio de Justicia en colaboración con el de Sanidad.

El Servicio de Información Toxicológica respondió 79.450 consultas en 2022 en toda España, de las que 62.651 fueron por intoxicación, 8.426 de ellas voluntarias, lo que supone un 13,4% del total (cuando en 2021 representaron el 12,8% y en 2020 el 9,7%). Dentro de las voluntarias, 6.997 fueron intentos de suicidio, dos tercios ejecutados por mujeres.

Ansiolíticos

En el 86 % de los casos se usaron medicamentos (principalmente ansiolíticos y antidepresivos), un 42 % combinando fármacos de distintos grupos terapéuticos. Cuando más se producen es en la franja horaria de 19 a 24 horas.

Lo que más alarma a este servicio es que el 20% de las intoxicaciones con fines suicidas se den entre los 11 y los 15 años, y un 13% en la de 16 a 19. Es decir, un tercio son jóvenes por debajo de los 20, "con claro predominio de las chicas".

Comparando con las de 2020, las consultas por este motivo y en esta franja de edad se han disparado "más del doble" que el año que estalló el covid-19.

Son tentativas evitables en las que "la pandemia tiene muchísimo que ver", ha resaltado Conejo, quien ha subrayado la necesidad, de extremar la vigilancia en este sector de población. "Hay que socializar al adolescente. Saquémosle del aislamiento", ha enfatizado.

"Hay que socializar al adolescente. Saquémosle del aislamiento". José Luis Conejo - Jefe del Servicio de Información Toxicológica

"Todo apunta a un aumento de la ideación suicida infantil", ha abundado Andoni Ansean, presidente de la Fundación Española para la Prevención del Suicidio, que ha alertado también de la explosión de autolesiones en esas edades: "No sabemos si son con intención suicida o no, pero están constatadas".

La tasa de suicidio, al alza desde 2000

El número de suicidios acumula cinco años consecutivos de aumento pero, como ha contextualizado Rafael Bañón, presidente del comité científico, ese incremento es solo en término absolutos debido al crecimiento paralelo de la población. Desde principios de este siglo, la tasa se mantiene estable en 7,6 suicidios/100.000 habitantes.

"Es una cifra tozuda muy difícil de modificar", pero que, y sin quitarle relevancia, "no es tan mala" si se compara con la de países del entorno, de modo que España, como otros del Mediterráneo como Grecia e Italia, acumula las tasas más bajas al contrario que los nórdicos o asiáticos.

Poco más de un tercio (el 36%) de las personas que intentaron suicidarse, casi un cuarto (el 23 %) de las que lo consumaron y el 19 % de los que lo pensaron habían recibido tratamiento previo, lo que demuestra que la atención a la conducta suicida tiene "una limitación importante en el acceso", ha lamentado el secretario General para la Innovación y Calidad del Servicio Público de Justicia, Manuel Olmedo.

Aunque el 90% de las personas que se quitan la vida tenían un trastorno mental previo, "no debemos caer en el reduccionismo" de pensar que todo suicidio procede de una patología psiquiátrica obviando que la mayoría de estos trastornos van acompañados de "circunstancias desencadenantes, ambientales o adaptativas, o incluso reacciones situacionales que no tienen por qué tener un sustrato patológico".

Sin tratamiento

Según datos de la Confederación de Salud Mental de España, más del 50% de las personas con trastorno mental no reciben ningún tipo de tratamiento.

En este sentido, se estima que en 2030 los problemas de salud mental serán la principal causa de discapacidad y una de cada cuatro personas sufrirá algún tipo de síntoma a lo largo de su vida, una cifra preocupante ya que "este tipo de enfermedad, que se considera invisible, impacta negativamente a la calidad de vida de los afectados y a sus familias".

Los síntomas más comunes en los problemas de salud mental son la ansiedad y la depresión, que afecta al 4% de los hombres y el 9,2% de las mujeres.

Bajas

El entorno laboral constituye uno de los ambientes que más impacto puede generar para la salud mental. El conocimiento de este hecho ha provocado el aumento de la preocupación por parte de las empresas, que cuentan con el objetivo de lograr crear espacios de trabajo que velen por una correcta salud mental de sus empleados.

Según datos del Ministerio de la Seguridad Social, durante el mes de mayo de 2023 se produjo el mayor número de bajas laborales por salud mental de los últimos 7 años en nuestro país, con un total de 56.648, una cifra que incluso supera la época de inicio del confinamiento en marzo de 2020, mes en el que se produjeron 50.998.

La entidad explica que, desde enero del año 2019, las bajas laborales por salud mental entre los jóvenes de 16 a 25 años han crecido un 91% y un 48% en los trabajadores de entre 26 y 35 años. Las mujeres y los adultos entre 35 y 49 años son los grupos más afectados por los problemas de salud mental.

El informe también especifica que los trastornos de ansiedad son el principal problema de salud mental que sufren los empleados españoles, ya que representan el 73% de los casos de trastornos mentales y de comportamiento en el trabajo. 

En este contexto, la presión de tiempo y sobrecarga de trabajo se presentan como la principal causa que afecta a la salud mental de los trabajadores (32%), seguida del trato difícil con clientes, pacientes y alumnos (16%), de la inseguridad laboral (11%), de la mala comunicación o cooperación en la empresa (7%) o de la falta de influencia sobre procedimientos del trabajo (5%).

Compromiso de la UE

Así las cosas, el ministro de Sanidad en funciones, José Miñones, ha reclamado este martes, un compromiso presupuestario de cada uno de los Estados miembros de la Unión Europea “para afrontar los retos que tenemos por delante” en materia de Salud Mental.

Así lo ha subrayado durante su intervención, vía telemática, en la conferencia de alto nivel ‘Un enfoque integral de la UE que dé prioridad a una buena salud mental para todos’ que ha organizado la Comisión Europea con motivo de la celebración, hoy 10 de octubre, del Día Mundial de la Salud Mental.

Junto a este compromiso económico, Miñones también ha defendido la necesidad de contar con guías de actuación que aseguren un marco homogéneo de actuación en este campo en toda la Unión Europea. En este sentido, ha reafirmado el compromiso de España durante la Presidencia del Consejo de la UE, para mejorar la Salud Mental en la región, estableciendo sinergias para que, no solo sea una prioridad para todos los Estados miembros, sino que, además, vectores como la prevención, la detección y el tratamiento sean comunes en toda Europa.