Se calcula que el coronavirus ha mutado miles de veces desde que empezó la pandemia. Estos últimos meses se ha estado hablando sobre la variante delta, pero las nuevas preocupaciones acerca de la transmisión y peligrosidad del coronavirus apuntan a la variante lambda, conocida también como andina o peruana.

Esta lleva en el punto de mira de los epidemiólogos del Centro Nacional de Epidemiología desde julio y aunque no sea tan conocida, según la GISAD, la plataforma mundial de seguimiento de las distintas cepas, España es el séptimo país del mundo con más casos provocados por esta variante, la cual está localizada en otros 31 estados. Y, aunque solamente se haya detectado una incidencia por debajo del 1% en España, según el Ministerio de Sanidad, esta variante podría ser tan contagiosa y evasiva a las vacunas como la delta. También, precisamente se está investigando si lambda está detrás de un brote de contagios de Cantabria que afectaría al menos a 80 personas.

¿Cuándo surge esta variante?

Lambda fue documentada por primera vez en Perú a finales del 2020 y, según los datos de la OMS, está detrás del 71,6% de los contagios en Perú, el 37% de los registrados en Argentina y el 32% en Chile, donde la vacunación masiva no ha podido frenar el impacto de esta cepa.

Estudios sobre la variante Lambda

Uno de ellos, dirigido por el virólogo chileno Ricardo Soto Rifo, se centró en la vacuna CoronaVac, del laboratorio chino Sinovac. En este se observó a un grupo de trabajadores de la salud voluntarios y encontraron que Lambda presentaba “capacidad de infección y de escape inmune incrementada versus los anticuerpos neutralizantes” que fomenta esta vacuna. Entonces, el alcance fuera de laboratorio de dicha pérdida relativa, nunca completa, de protección está aún por ver.

En el otro estudio, un equipo de la Universidad de Nueva York comprobó reducciones similares para las vacunas de Pfizer y Moderna, que los autores consideraron como “relativamente menores”, pero también está pendiente de revisión científica.

Por lo tanto, aunque los datos señalan que sí, no está probado ni afirmado todavía si esta variante es más transmisible que otras variantes, si causa una enfermedad más grave o si vuelve menos efectivas a las vacunas: “No tenemos mucha información, en comparación con las otras variantes”, dijo Ricardo Soto-Rifo, virólogo de la Universidad de Chile que ha estudiado a Lambda.

¿Qué dice la OMS?

La OMS incluyó esta variante en su lista de "variantes de interés" a mediados del mes de junio y, actualmente está presente en más de treinta países. En su impacto potencial para la salud, el Ministerio de Sanidad indica que se trata de "mutaciones posiblemente relacionadas con un aumento de transmisibilidad y escape a la respuesta inmune frente a las variantes previas".

Aunque aún no esté certificado científicamente, la OMS ha llegado a la conclusión de que esta variante conlleva una serie de mutaciones que se sospecha que podrían tener "implicaciones fenotípicas", como un posible "aumento de la transmisibilidad" o de la "resistencia a los anticuerpos neutralizantes".