­Relata el músico mallorquín Miquel Ramis que un año de excedencia da para mucho. Por ejemplo, para grabar el disco con el que siempre había soñado. Tras retirarse durante muchos meses en una finca de Campanet, donde compuso todos los temas, y lejos del hotel donde trabaja, grabó en los estudios Sonoteque su primer trabajo discográfico, Núvols baixos. Lo registró con banda, en concreto, con los siguientes componentes: Jane Rose (voz), Esteve Huget (batería), Víctor Tugores (bajo), Miquel Llinàs (piano) y José Murcia (percusiones). Algunas canciones, explica Ramis, han contado con colaboraciones puntuales. "Toni Pastor ha tocado la guitarra acústica en dos temas; Víctor Uris, la armónica en uno; Bartomeu Payeras, la flauta en otro o Jordi Álvarez y Agustí Serra, la guitarra eléctrica en otro más", enumera Ramis.

El músico y compositor ha desplegado su folk mediterráneo, pero a la vez muy mallorquín, en el disco, "que es íntimo y personal, pues en él cuento mis vivencias personales, mis viajes y aventuras", indica. Por ejemplo, el trabajo arranca con un tema, Adelaida, que relata un viaje a Australia. Más adelante, en otra de sus composiciones, Ramis se atreve con un homenaje a la Tramuntana.

El productor de estas canciones ha sido Miquel Llinàs, el pianista del disco, el técnico de sonido y copropietario del estudio Sonoteque.

Ramis habla de algunas de sus influencias, que probablemente el consumidor final del disco rastreará. Entre ellas, están el folk británico, Nick Drake o Led Zeppelin. Entre sus guitarristas preferidos, menta a Michael Hedges o Jimmy Page. "Yo toco la guitarra acústica al finger style, una manera peculiar de tocar el instrumento típica del folk", añade.