Lo imposible está basada, como repite incansablemente la promoción del filme, en la historia real de una familia superviviente del tsunami de 2004 en el sureste asiático. El título más la publicidad desvelan el desenlace, dejando escaso resquicio a la incertidumbre de si será un final total o parcialmente feliz. El único antecedente, parcial, es la reciente Más allá de la vida, de Clint Eastwood. La diferencia entre ambas es que el americano recrea la tromba de agua atravesando una localidad, mientras que el español elige uno de los centros turísticos más aislados.

Bayona y el guionista Sergio Sanchez concentran todos sus esfuerzos en el cómo, en recrear con la mayor fidelidad posible la magnitud del desastre. El libreto tiene la virtud de no embarcarse en tramas secundarias superfluas, pero roza el melodrama con diálogos algo previsibles y reiteración de gritos desgarrados. En el reparto Naomi Watts (21 gramos, Mullholand drive) y Ewan McGregor (Trainspotting, Beginners) no son actores galácticos y sí especialistas en papeles diferentes y exigentes. Watts recibe mayor cuota de protagonismo y hace una interpretación muy intensa y convincente, sin llegar a ser de Oscar. McGregor acepta su rol de consorte y también logra emocionar. La realización repite pros y excesos: impresionante recreación de la costa devastada y el hospital desbordado; dificilísimas, apabullantes las secuencias de la deriva de Watts y el chico en los embates más intensos de la marea; y abuso de la música subrayante, tics de su pasado en el género de terror. Película para amantes del drama realista; imprescindible una caja grande de kleenex.

Lo imposible

España, 112 min.

Director: J. A. Bayona

Actores: Naomi Watts, Ewan McGregor, Tom Holland, Samuel Jostlin

Cines: Augusta, Ocimax, Porto Pi, Cinesa Festival Park, Multicines Manacor.