Fútbol

El Mallorca recibe un regalo de 2,5 millones

El Valladolid pagará por Amath al club de Son Moix una cantidad que está por encima del valor del punta tras su flojo rendimiento como bermellón

Amath celebra un gol con el Mallorca en Primera División.

Amath celebra un gol con el Mallorca en Primera División. / EFE

Redacción

Es un regalo de 2,5 millones de euros para el Mallorca. Con el pitido final del partido entre el Valladolid y el Villarreal B (3-2), que significó el ascenso a Primera División, en la planta noble de Son Moix se frotaron las manos. Acababan de asegurar su primer ingreso en este mercado de verano que comenzará dentro de un mes. Aún no se ha cerrado el curso -oficialmente lo hace el 30 de junio–, pero en el acuerdo firmado en enero entre las partes estipulaba que, si los pucelanos regresaban a la elite, deberían abonar la opción de compra obligatoria.

Estos 2,5 millones se antoja como una cantidad de dinero importante para un jugador que había perdido mucho valor. De hecho, en la dirección deportiva que dirige Pablo Ortells tienen claro que difícilmente ahora un club pagaría esa cantidad por un ariete de sus características y con un bagaje tan pobre en las últimas campañas.

Es verdad que le afectó una lesión en el dedo meñique de su pie derecho, que le obligó a ser intervenido y que se complicó mucho más de lo esperado, pero tuvo tiempo de sobra para resarcirse. Y lo cierto es que no tuvo éxito vestido de bermellón.

Y eso que Amath fue una de las claves del brillante ascenso del Mallorca de la campaña 2020/2021, con Luis García Plaza en el banquillo, tras anotar nueve goles y marcando las diferencias en los partidos importantes en Segunda División. No obstante, su rendimiento entre los mejores cayó en picado de forma vertiginosa, a pesar de contar con oportunidades.

En la campaña 2021/2022 apenas jugó diecinueve encuentros -nueve como titular-, y no marcó. La pasada campaña es la que tuvo más minutos, pero tampoco cuajó. Anotó dos tantos en veinticinco duelos -doce desde el inicio-, mientras que en esta que ha finalizado, tuvo que hacer las maletas para buscar protagonismo en Pucela. En la primera vuelta, con Javier Aguirre, jugó quince partidos -tres como titular- y no perforó la meta rival, mientras que en el Nuevo Zorrilla, tras llegar como cedido, volvió a ser importante. Anotó cinco goles y repartió dos asistencias en apenas nueve choques -se lesionó-, una muestra de que en Segunda su rendimiento es mucho mayor.

Nacido en Dakar en 1996, se da la circunstancia que el internacional se formó en la cantera de los vallisoletanos antes de empezar un periplo que le llevó al Atlético de Madrid, Tenerife y Getafe antes de recalar en la isla. «Amath se queda en casa», anunció el Valladolid ayer en el comunicado en el que certifica el fichaje del senegalés tras el «cumplimiento de la opción de compra acordada con el Mallorca».

La próxima será su séptima temporada en Primera, en donde acumula 121 encuentros y marcado seis tantos. Es evidente que el ariete tendrá una buena oportunidad para reivindicarse, pero lo bueno es que el Mallorca ingresará estos 2,5 millones que le permitirán recuperar lo que pagó por él en su momento. No es un negocio redondo, pero al menos no ha sido malo.

Suscríbete para seguir leyendo