«Creo que hoy tiene que hacer la rueda de prensa Pedro. Ha sido él quien ha estado a pie de campo y os lo cedo. Tratármelo bien, no le metáis mucha caña». Luis García comparecía en la sala de prensa de Son Moix para ceder todo el protagonismo a su segundo, Pedro Rostoll, quien ayer dirigió al Mallorca desde la zona técnica, ante la ausencia del preparador madrileño, sancionado.

Contento y sereno, Rostoll no se salió de la línea argumental de Luis García e insistió en la importancia de no hacer cálculos y pensar solo en el siguiente partido. «La llegada al vestuario ha coincidido con el final del partido en Almería y la alegría ha sido doble. Creo que este triunfo llega en un momento maravilloso, después de dos partidos en los que lo habíamos intentado de todas las maneras. Tras los encuentros en Castellón y Sabadell, por cómo se habían dado, creo que mentalmente necesitábamos que pasaran estas cosas. El equipo ha jugado muy ordenado, era una de las premisas que se habían trabajado, quizás sin tanta brillantez, pero ordenado. De todas formas, si al míster no le gusta hacer números, a mí los cálculos todavía me gustan mucho menos», confesó.

Rostoll explicó durante la comparecencia que ya lleva muchos años en este mundo como para sumar más «nervios» a su estado por tener que dirigir un partido, pero sí admitió que su labor sobre el verde cambia bastante. «Los nervios son parecidos. Sí que es verdad que se vive de forma diferente. Dirigiendo el partido estás dando indicaciones todo el rato, no es lo mismo que estar ayudando al míster y comentándole las cosas que ves. En cuanto a los nervios, son lo mismo. De todas formas, no soy yo una persona que se ponga muy nerviosa con estas cosas», admitió.

El segundo entrenador del Real Mallorca también desveló los problemas que llevaron a Antonio Raíllo a ser sustituido en la segunda parte: «Ya en el descanso nos ha comentado que tenía alguna molestia en la rodilla izquierda, pero que iba a seguir sobre el verde para comprobar si podía continuar. Al final nos ha pedido el cambio. Habrá que esperar a las pruebas para conocer el verdadero alcance de la lesión».