Pablo Alfaro mostró mucha confianza en el Mirandés de cara a la eliminatoria que le enfrentará al Mallorca a partir de mañana. "Estoy muy convencido de que mi equipo va a dar la cara", subrayó ayer el técnico en la sala de prensa de Anduva. El preparador, que ya era entrenador de los burgaleses en el tramo final de la pasada campaña en Segunda, tiene claro que sus futbolistas van a dar el nivel. "Nos ha tocado el rico de la categoría, con una estructura de Primera División, pero cuando el lunes mis jugadores vieron que salía la bolita y que nos tocaba el Mallorca ya pusieron las orejas tiesas", señaló en clara referencia a que no hace falta ninguna motivación extra de cara a un enfrentamiento de este calibre y de tanta trascendencia. Quizá por eso el ex jugador del Sevilla, Zaragoza y Barcelona, entre muchos otros, no dudó a la hora de calificar a esta eliminatoria como "la estrella" del play-off.

Alfaro considera clave tener paciencia para tumbar a los baleares. "Ante el Mallorca es una eliminatoria de ciento ochenta minutos, pero ahora solo nos preocupan los noventa primeros", comentó. Eso sí, confía en el rendimiento de sus pupilos, que ya han afrontado en otras temporadas duelos de similar importancia. "En el Mirandés hay más de cincuenta play-off de experiencia entre mis jugadores, saben lo que es perfectamente", recordó esperanzado. El aragonés, que también es médico traumatólogo, se felicitó por el hecho de que el encuentro definitivo sea en su casa. "Queríamos la vuelta en Anduva, eso son palabras mayores", apuntó. Por eso recomendó a los aficionados que vivan con pasión este duelo con el Mallorca. "Tenemos que disfrutar esta eliminatoria tan bonita", señaló antes de apuntar que están en el momento que llevaban buscando durante todo el curso. "Cuando empezábamos la temporada soñábamos con este reto", afirmó.

Alfaro elogió a los de Vicente Moreno: "Es un equipo con muchas tablas, con pegada y velocidad. Desde la primera vuelta lo ha hecho bien y ha tenido un buen colchón", manifestó.

Sin embargo, considera que el hecho de que el Mirandés no certificara hasta la última jornada su condición de campeón -derrotó al Gernika- es un aspecto positivo. "Nos ha venido muy bien tener un grupo tan competitivo durante la temporada, de hecho las máximas cuatro puntuaciones están ahí", finalizó.