El recinto deportivo Dani Jarque acogerá a partir de las 12 del mediodía un duelo de filiales, Espanyol B-Mallorca B, marcado por las funestas estadísticas que arrastran ambos equipos como locales, lo que favorece en esta ocasión al once rojillo.

Con permiso del Eldense, Espanyol y Mallorca, con solo cinco puntos sumados en casa, están en el podio de equipos cuyo balance como local es más que decifitario. Unos números que para la ocasión favorecen al Mallorca B, ya que como visitante pasa por ser uno de los cuadros más aseados de la categoría. Y frente a un equipo como el filial blanquiazul, que suma cuatro derrotas en su campo, no deja de ser un acicate.

Los periquitos, muy disminuidos en potencial tras el traspaso al Sevilla B de su mejor jugador, el delantero Marc Gual -ya jugó ayer en Son Moix-, y con un equipo muy tierno para la categoría, comparecerán con la moral en alza tras su trabajado empate siete días atrás frente al Atlético Baleares en Palma.

Con todo, el técnico de los catalanes, David Gallego, no podrá sentarse en el banquillo tras ser expulsado en Son Malferit y ser sancionado con dos partido. Tampoco estará el central Antonio, que cumple ciclo de tarjetas, mientras que el lateral derecho juvenil Pipa vuelve tras jugar con la selección sub-19 un torneo en Tbilisi (Georgia).

Más efectivos para Olaizola

Para el partido de este mediodía, el técnico rojillo Javier Olaizola ya podrá contar con el mediocentro Álex Serrano y el atacante Ángel Sánchez, una vez recuperados de sus problemas físicos. One y Tià Sastre, que estuvieron frente al Prat en el banquillo pese a no estar ambos al cien por cien para jugar, sí que estarán a punto para hoy. Continúan fuera de combate Sergio Cortés -aunque éste va apurando los plazos de recuperación con rapidez- y Ángel Rodado -fuera de combate previsiblemente hasta el 2017-, mientras que bajo palos seguirá Jaume Valens, toda vez que el técnico Javier Olaizola tiene decidido rotar a sus portero dado el gran rendimiento de ambos.