La temporada 1953-54 es, quizá, la más negra de la historia del Mallorca. Por los problemas económicos y directivos, que sumieron al club en una crisis deportiva que llevó al equipo al descenso a la Tercera División, firmando una campaña terrorífica en Segunda: colista después de 30 partidos, con solo nueve puntos (3 victorias, 3 empates y 24 derrotas), 40 goles a favor y 103 en contra. El equipo mallorquinista nunca vio la luz en toda la temporada en un Grupo II en el que Las Palmas logró el título y el ascenso a Primera, curiosamente con Satur Grech en el banquillo, técnico que había iniciado esa Liga con el Mallorca.

Los problemas comenzaron en el verano de 1953, cuando el presidente Antonio Buades presentó la dimisión. El club tenía una deuda de más de 340.000 pesetas de entonces (más de 2.000 euros) y se tenía que hacer efectiva antes del 1 de agosto. Era julio y una junta gestora se hizo cargo de la entidad con mucho trabajo por delante para conseguir que el equipo pudiera comenzar la Liga.

El Lluís Sitjar, hipotecado. La plantilla no había cobrado todo el sueldo de la temporada anterior y para la que se avecinaba el coste era de más de 150.000 euros (unos mil euros de ahora), un dineral en aquella época. El 3 de agosto, en asamblea, la directiva decide solicitar un préstamo bancario y se pone como aval el Lluís Sitjar. La hipoteca sobre el estadio permite reunir una cierta cantidad, que a finales de mes se aumentó con algo más de cien mil pesetas (600 euros) en una nueva asamblea que procedió a proclamar como nuevo presidente a... Antonio Buades. Su regreso afectó también a la planificación deportiva.

Cinco partidos fuera al inicio de Liga y fichajes por partidos. La mala situación económica era tan mala al inicio de la Liga que la directiva decidió modificar el calendario para ahorrarse dinero en desplazamientos, por lo que el equipo jugó cinco partidos seguidos como visitante tras el 15 de noviembre: frente al Atlético Tetuán (5-1), Jerez CD (3-0), Real Balompédica Linense (5-1), Las Palmas (6-0) y Tenerife (8-0). En este partido jugó como portero Carreras, cedido por Las Palmas solo para ese encuentro, por la lesión de Salom y tras descartar el club que viajara el portero suplente Barceló, tal y como había pedido Satur Grech.

Satur Grech se fue en enero y ascendió con Las Palmas. Grech fue el técnico que comenzó la temporada con el Mallorca, pero en enero decidió aceptar una oferta de Las Palmas, que estaba en el mismo grupo que el conjunto rojillo, y que se proclamó campeón de grupo, logrando el ascenso a Primera. No fue el único en abandonar el barco mallorquinista: Obrador volvió en octubre al Manacor y el extremo Miquel Sans se fue en junio a Las Palmas para suplir al lesionado Macario y subir a Primera.

Cambio de directiva y descenso. El descenso ya era inevitable en enero y tras la marcha de Satur Grech fue nombrado técnico el preparador físico, Joan Rotger. En mayo de 1954 fue elegido presidente Juan María del Valle. El club tenía ese año más de 3.000 socios.