Cuando se enfrentan un equipo que ha sumado veintiocho de treinta puntos en la Liga y otro que acumula cinco derrotas consecutivas la lógica es aplastante y dicta que el primero vencerá al segundo. Pero esta tarde el Mallorca aspira a conseguir el más difícil todavía ante el Barcelona para salir de la crisis en la que se encuentra inmerso desde octubre.
Es uno de esos encuentros que a todos los futbolistas les gusta jugar, de aquellos en los que los focos del panorama del fútbol nacional e internacional están pendientes, pero los rojillos no están para lucimientos. Hoy hay que trabajar más que nunca ante los Messi, Xavi y compañía para tener alguna opción, por remota que parezca ahora, para superarles en un Iberostar Estadio que no se va a llenar. Ni de lejos. La cuesta abajo y sin frenos que está experimentando el Mallorca ha disminuido sustancialmente las expectivas que generó tras las primeras cinco jornadas, por lo que medirse al líder indiscutible del campeonato no es para ser optimistas. Pero en este deporte ya hay ejemplos de sobra de que todas estas premisas son relativas. Sobre todo si se le añaden las numerosas bajas con las que cuenta Joaquín Caparrós -Nunes, Antonio López, Javi Márquez, Joao Víctor, Giovani y Álvaro -.
El técnico, que incluyó en la lista a los juveniles Brandon y Cristeto, recupera a Ximo para el lateral derecho, una circunstancia a celebrar porque cuando se lesionó en Riazor hace once días estaba descartado por su esguince en la rodilla. Salvo recaída de última hora ocupará el flanco diestro en una defensa formada por Geromel y Conceiçao como centrales y Bigas en la izquierda. ?
Además de Aouate en la portería, el centro del campo será presumiblemente el formado por Martí y Pina en el doble pivote, por lo que Fontàs será suplente ante el equipo en el que se ha formado y del que ha llegado cedido. En la banda derecha Nsue adelantará su posición respecto al duelo de hace una semana ante el Deportivo, mientras que en la izquierda se ubicará a Pereira, en principio. ??
Esto significaría que Arizmendi, que debutó en Liga como titular en tierras gallegas, regresaría al banquillo. Al menos así lo ha probado durante la semana, tanto en Son Bibiloni como en Son Moix. La dupla de ataque será la de siempre, formada por Víctor y Hemed. La ausencia de Gio, que padece una microrotura en el muslo, dejará más libre al ariete algaidí, que en algunas ocasiones se ha visto obligado a pegarse a la banda para dar cabida al mexicano.
Mientras, el Barcelona quiere retomar el pulso en la Liga, tras la inesperada derrota en Glasgow ante el Celtic en la Liga de Campeones. Para ello, el técnico, Tito Vilanova, recupera a Busquets, y con la plena recuperación del defensa Gerard Piqué, que apunta a titular tras haber superado la lesión que sufrió hace más de mes y medio en el pie izquierdo. Se especulaba que el capitán Puyol, entrara en la lista, pero finalmente quedó fuera por no estar plenamente recuperado.
Con Piqué recuperado, el internacional español y Mascherano formarían el eje de la zaga, con Alba y Alves ocupando los laterales. Busquets actuará, como es habitual, en la posición de pivote defensivo, junto a Xavi y Cesc. En ataque Messi estará acompañado por Alexis y Villa. Caparrós ya ha adelantado que no montará ningún plan especial para frenar a ´La Pulga´. Está claro que para tener éxito hay que pararlo. Como sea.
