Llucmajor: El santuario de Gràcia acoge una misa en memoria del obispo Antoni Vadell

Dos años después de la muerte del obispo auxiliar de Barcelona, Antoni Vadell (Llucmajor, 1972-Barcelona, 2022), el santuario de la Mare de Déu de Gràcia (Llucmajor) ha acogido este sábado una emotiva celebración en memoria del prelado mallorquín, considerado como uno de los clérigos más brillantes y activos de los últimos tiempos y al que muchos veían como el sucesor natural del actual obispo Sebastià Taltavull al frente de la diócesis de Mallorca. El cuerpo de Antoni Vadell, que murió como consecuencia de un cáncer de páncreas, descansa en el santuario de Gràcia.

A partir de las 11 de la mañana se ha celebrado la Eucaristía presidida por Monseñor Sebastià Taltavull y en la que ha participado una gran multitud de gente que llenaba tanto la iglesia de Gràcia como sus inmediaciones. 

Una vez terminada la misa, todos los presentes han cantado con fuerza los ‘Goigs a la Mare de Déu de Gràcia’. La alcaldesa de Llucmajor, Xisca Lascolas, ha agradecido la implicación de las instituciones que han hecho posible la reapertura de las zonas afectadas por las intensas lluvias del año 2016 que complicaron la accesibilidad al santuario.

Por voluntad de la parroquia y del pueblo de Llucmajor se ha querido que este aniversario coincidiera con la inauguración del camino de acceso al santuario y la zona de aparcamiento ahora ya reconstruidos. Todo este espacio había quedado intransitable en el mes de diciembre de 2016, debido a un grave movimiento de tierras producido por la erosión natural de los terrenos y las intensas lluvias.

El acto de homenaje al obispo Antoni Vadell ha terminado con un breve concierto de órgano a cargo de Tòfol Barros y un refresco que ha ofrecido el propio Ayuntamiento ‘llucmajorer’.