Lengua y cultura popular en Mallorca: La Escola de Mallorquí de Manacor celebra 50 años siendo el latido de un pueblo

La Escola Municipal de Mallorquí de Manacor (EMM) conmemora este año el 50 aniversario desde su fundación. Aunque su semilla empezara a germinar unos años antes de la fecha oficial, aún bajo el régimen de Franco. Reconocida como uno de los primeros centros educativos que ofreció cursos de lengua propia en Balears en 1973, fue el propio Francesc de Borja Moll quién recomendó tanto al Consistorio de la época como a sus ideólogos, Gabriel Barceló y Josep Maria Salom, que no utilizaran la palabra català por el temor a que el proyecto no pasara el corte de la dictadura franquista.

Pero aunque se hable de principios de los setenta como arranque, el germen como decimos brotó unos años antes en la clandestinidad. Gabriel Barceló (quien después sería el primer director y profesor del centro) trabajaba en 1968 en el colegio Ramon Llull dando clases de dibujo técnico. Antes de acabar de clase, dejaba unos minutos al día para enseñar el catalán entre sus alumnos, siempre ansiosos de poder escribir bien el idioma que hablaban.

Barceló lo había conocido con las Rondalles Mallorquines y después lo había perfeccionado de forma autodidacta. Una práctica que casi le cuesta el puesto de trabajo cuando un inspector de Barcelona le pilló en un descuido. Afortunadamente el hombre, incluso emocionado, no informó nunca de lo sucedido.

«La Escola es el latido de un pueblo. Responde a una inquietud, es una joya única en Mallorca, pionera en muchas cosas en la isla, como por ejemplo los talleres de rap en catalán para niños y jóvenes, o los talleres de Llengua Divertida, con el objetivo de quitar la vergüenza que muchas personas recién llegadas y castellanohablantes sienten cuando deben hablar en catalán», afirma el alcalde de Manacor, Miquel Oliver. «La Escola es un ente vivo, una entidad que nació de unas necesidades y que ha evolucionado y se ha adaptado siguiendo este latido», expresa la directora del EMM, Margalida Rosselló.

Así, se pasó de las clases clandestinas al nacimiento de la Escola como eje vertebrador de la enseñanza de la lengua catalana dentro del municipio, con clases en las escuelas, en los núcleos del municipio y todo mucho antes de que existiera una Ley de Normalización Lingüística. Posteriormente con los años, ha evolucionado y se ha adaptado también a las necesidades de cada momento: impartir clases para aquellas personas que nunca habían podido aprender la lengua en la escuela, talleres de acogida lingüística, o dar recursos para que la población recién llegada pueda aprender a hablar y escribir en catalán y conozca el entorno y la cultura del lugar de acogida.

Lengua viva de Mallorca

Pero volvamos atrás. El delegado de Cultura del Ayuntamiento, Josep Maria Fuster, y el alcalde Pedro Galmés, en junio de 1973, pidieron permiso a las altas instancias de la dictadura para crear «una escuela municipal de lengua y cultura con la misión de impartir lecciones sobre la lengua viva de Mallorca y con la intención de organizar conferencias sobre temas de nuestra literatura y arte».

El permiso llegó y en octubre de ese año empezaron las clases de lengua catalana. Comenzaron en un piso alquilado de la calle Pere Llull de Manacor, compartido con los ensayos de la Banda de Música. Los primeros 38 alumnos matriculados dieron paso a un crecimiento progresivo. Si en 1974 ya eran 93 alumnos, un año después 374 y hasta 1.290 en 1976. Aunque el récord se logra durante el curso 1978-79 cuando 2.867 alumnos locales reciben clases de catalán.

Los inicios semiclandestinos de la sección lingüística de la escuela también se reprodujeron con el ball de bot. Dos alumnos que asistían a los cursos de lengua pidieron a Barceló dar clases en la Escola. El ball de bot estaba escondido y denostado, y no fue hasta 1982 cuando se fundó la sección y se empezó a recuperar a nivel popular. Actualmente el EMM ofrece clases de ball de bot de tres niveles y talleres de mateixes también de tres niveles, y todos con lista de espera.

En 1990, nueve años después de su recuperación, los Cossiers pasaron también a integrarse dentro de la Escola. Se instaura el Reconeixement de Mèrits, un premio anual que desde entonces distingue a aquellos que han defendido y amplificado la cultura propia: entre ellos Guillem d’Efak, Joan Bibiloni, Antoni Riera o el actor Toni Gomila.

El EMM custodia los trajes de los Cossiers y es la institución responsable de su coordinación, ensayos y rutas desde 1990. También custodia la Mulassa, el nuevo símbolo de la recuperada fiesta de Sant Jaume, patrón de Manacor.

En 2010 y después de ochos años sin sede propia el Ayuntamiento habilita el Molí den Beió, una antigua harinera del siglo XVIII como espacio permanente. Y llega el segundo boom: más de 800 matrículas para las distintas ofertas, más de 500 de ellas para aprender catalán. Fue cuando la crisis dejó espacio para prepararse y muchos lo administraron para obtener el certificado C de catalán, requisito para ser funcionario en Balears. Tres aulas de estudio: la Antoni Maria Alcover, la Francesc de Borja Moll y la Ramon Llull, más otra de baile, la Antoni Fai, para cursos monográficos sobre Sant Antoni, o la enseñanza de las danzas rituales entre los más pequeños.

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Una escuela dinámica

«La escuela está viva, es joven, es dinámica. Llega a los 50 años con las melodías tradicionales de xeremies y tamborinos pero también a ritmo de rap. Cada semana hay visitas de escuelas e institutos, por aquí pasan cada año más de 750 alumnos de los centros educativos del municipio. La EMM tiene cuerda para rato porque es un espacio vivo que se ha sabido adaptar y crecer a las necesidades sociales de cada momento histórico», dice Oliver.

«La Escola de Mallorquí no es la escuela de la lengua de los abuelos, sino que trabaja por la lengua de nuestros nietos», ha asegurado por su parte el delegado de Política Lingüística, Sebastià Llodrà, dando a entender la proyección de futuro que tiene la institución. Actualmente tiene más de 1.700 alumnos matriculados.

Esta semana se ha presentado el programa de actos con motivo de la conmemoración de este aniversario. La celebración arrancó este viernes 28 de abril con la presentación del libro La Escola Municipal de Mallorquí de l’Ajuntament de Manacor. Quarta part: 1994 - 2001, de Gabriel Barceló Bover.

El 12 de mayo, a las 19 horas, se presentará El libre de la neu, de Tomeu Bonet, Miquel Salamanca y Lluís Valcaneras, también en el Molí d’en Beió. El sábado 13 de mayo, a las 19.30 horas se llevará a cabo la Muestra de indumentaria mallorquina de los siglos XVIII y XIX, a cargo de l’Associació d’Amics de l’Escola de Mallorquí. Finalmente el acto central de la celebración del medio siglo será el 19 de octubre a las 19 horas en el Auditori de Manacor.