El entierro de la sardina baja el telón en Mallorca del carnaval 2023

Pòrtol vive con intensidad una de sus fiestas más carismáticas que reúne a numeroso público para ver a la comitiva fúnebre

Miquel Bosch

Pòrtol baja el telón del carnaval con una de sus fiestas más carismáticas, el entierro de la sardina. Así, este martes la comitiva fúnebre de la sardina volvió a recorrer las calles de Pòrtol. Con una puntualidad británica, a las 18.30 horas, el pasacalles arrancó encabezado por la banda de Música de Marratxí, que con sus melodías marcaba el paso de la comitiva que portaba la sardina a hombros por cuatro portadores. Las autoridades locales no se perdieron la celebración pese a que hubo la ausencia del alcalde de Marratxí, Miquel Cabot, que por motivos de salud no pudo asistir al entierro de la sardina.

Este acto que pone fin a los días de bauxa de carnaval, está organizado desde hace más de treinta años por el club de “Es Turo”. De hecho, cabe recordar que Pòrtol fue el primer pueblo de Mallorca en celebrarlo, tanto es así que en los primeros años venían autocares de otros clubs tanto de Marratxí como de Palma, cuyos componentes iban de luto total como marca la tradición.

Delante de la sardina, iban los componentes de Dimonis de Fang de sa Cabaneta disfrazados de muerte y que con su fuego lanzado por la boca daban un toque más de espectáculo al entierro de la sardina, en el que tampoco faltó el cura acompañado de tres monaguillas, todas ellas componentes del club “Es Turo”.

Las mejores fotos del entierro de la sardina que ha despedido la fiesta del Carnaval en Mallorca

Las mejores fotos del entierro de la sardina que ha despedido la fiesta del Carnaval en Mallorca / Pere Joan Oliver

Numeroso público

En las calles de Pòrtol se congregó numeroso público que no se quiso perder el desfile de la comitiva fúnebre que hizo el habitual recorrido que tuvo como punto de partida el club de la Tercera Edad, en la calle Ca Ses Monges, para finalizar en la plaza de Can Flor, donde ya esperaba una multitud de gente para asistir al crematorio.

Después de las tradicionales tres vueltas al fogueró, la sardina pasó a mejor vida. Seguidamente los asistentes degustaron coques y sardinas.