La consellera de Agricultura, Pesca y Alimentación, Mae de la Concha, ha anunciado este viernes que la nueva Política Agraria Común (PAC) para el periodo 2023-2027 reconocerá «por fin» el factor de la insularidad y «compensará» al sector agrario y agroalimentario de Balears, tal y como se ha plasmado en el plan estratégico que España presentará a Bruselas para su aprobación. En la práctica, ello se traducirá en un 60% más de ayudas para el sector, que hasta la fecha recibía 14,4 millones de euros del valor medio por hectárea y ahora pasará a percibir 23 millones de euros

El valor medio de la hectárea se situará ahora en 188,64 euros en Balears, lo que supone un aumento del 50,3 por ciento, situándose por encima de la media nacional, cuando antes estaba un 18 por ciento por debajo.

De la Concha ha calificado de «histórico» el acuerdo que beneficiará a la agricultura balear porque supondrá una «mejora sin precedentes» en las ayudas que recibirán de la PAC, por lo que los payeses isleños «podrán competir en igualdad de condiciones que los de la península».

Además, las pequeñas y medianas explotaciones recibirán pagos redistributivos, ya que el 85% incrementarán el valor de sus derechos de ayuda básica, por lo que las explotaciones de hasta 5,53 hectáreas recibirán hasta 994.000 euros más, mientras que las de 5,53 a 23 hectáreas percibirán tres millones de euros más.

Otro aspecto destacado de la PAC es la regularización de superficie agrícola sin derechos. Balears es una de las comunidades con un mayor porcentaje de superficie declarada sin derechos de PAC, que suman unas 11.067 hectáreas. A raíz de la nueva propuesta, en la campaña de 2023 los agricultores que demuestren que tienen tierras que cultivan podrán solicitar derechos de PAC. Se priorizarán los cultivos de viña, frutales, hortaliza y olivares.