El proyecto de refugio en la finca Galatzó (es Capdellà, Calvià), el primero de estas características en este municipio eminentemente turístico, ha dado un nuevo paso administrativo con la tramitación de una declaración de interés general al tratarse de suelo rústico. La instalación, que supondrá una inversión de 1,4 millones de euros, contará con 52 plazas, un pequeño bar-merendero y un espacio multifuncional.
A partir de ahora, tal y como publicó ayer el Boletín Oficial de la Comunidad (BOIB), se abre un periodo de información pública durante dos semanas, para que quien lo desee pueda presentar alegaciones. El interés general se requiere desde el momento en que el refugio se proyecta sobre las antiguas porqueres de la possessió, por lo que es necesario un cambio de usos. La institución encargada de ejecutar la nueva infraestructura será el Consell de Mallorca.
Concesión por 30 años
En este sentido, cabe recordar que el pasado mes de octubre el alcalde de Calvià, Alfonso Rodríguez Badal, y la entonces consellera insular de Medio Ambiente, Sandra Espeja, firmaron un acuerdo por el cual se formalizó la concesión administrativa de ses porqueres de Galatzó para su reforma y adecuación como refugio de montaña y su posterior integración en la Xarxa de Refugis de la Ruta de Pedra en Sec, gestionado por la institución insular. En virtud de ese convenio, la administración municipal cedió la concesión administrativa de esta instalación por un periodo de 30 años.
Ses Porqueres está formado por diversas construcciones adosadas entre sí, que fueron construidas a principios del siglo veinte para la explotación agrícola-ganadera de la finca.
Este conjunto está situado a 15 metros al este del edificio principal -las cases de possessió de Galatzó-, y tiene una superficie total construida de 1.111 metros cuadrados.
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