La construcción de la vivienda unifamiliar con piscina en lo alto de la Serra de Alfàbia, que cuenta con licencia municipal de obras concedida por el ayuntamiento de Bunyola en el año 2017, podrá seguir adelante si los dos informes restantes, uno por parte de la Xarxa Natura 2000 y otro por parte del Paraje Natural de la Serra de Tramuntana, son favorables. Así lo admite el alcalde de Bunyola, Andreu Bujosa (Esquerra Oberta), que argumenta que "las licencias son actos reglados y si tiene todos los informes favorables no cabe la denegación".
El alcalde tenía previsto firmar hoy el decreto de paralización cautelar de las obras en base a un informe jurídico municipal que destaca la ausencia de los citados dictámenes. En caso de ser favorables al promotor, que según la licencia municipal a la que ha tenido acceso este diario es Eduardo Requin Coll, el Ayuntamiento levantará la suspensión cautelar para que puedan retomarse las obras. En caso contrario, se "revisará" la licencia, en palabras de Bujosa.
La licencia, que ya se solicitó ante el ayuntamiento de Bunyola en el año 2008, especifica que se trata de una vivienda unifamiliar con piscina con una extensión de 426 metros cuadrados y un presupuesto de 402.775 euros. La parcela donde se prevé la construcción tiene más de cuatro millones de metros cuadrados y está calificada como Área Rural de Interés Paisajístico (ARIP), entre otras figuras proteccionistas que, no obstante, no impiden la construcción.
Según explica el alcalde de Bunyola, en un primer momento el expediente acumuló diversos informes negativos cuyas prescripciones habría cumplido la promotora realizando una modificación del proyecto inicial que consistió en una reducción importante de la extensión de la futura vivienda. Después de estos trámites, "en diciembre de 2017 los servicios técnicos del Ayuntamiento consideraron que la licencia podía concederse", añade Bujosa, que admite que la denuncia del GOB "ha sido el detonante" para que este proyecto fuera revisado por la administración.
La denuncia pública del grupo ecologista se produjo el pasado miércoles, días después de que los agentes de Medio Ambiente del Govern ya constataran la existencia de movimientos de tierra en lo alto de la Serra de Alfàbia, a pocos metros de las antenas de telecomunicaciones.
Un día después, ayer jueves, el conseller de Medio Ambiente, Vicenç Vidal, ya anunció que había comunicado tanto al promotor como al Ayuntamiento que ordenasen la paralización de las obras debido a que la licencia concedida por Bunyola no iba acompañada de dos informes preceptivos. Actualmente, las obras están suspendidas a la espera de la resolución del expediente.
Un camino ilegal y perforaciones en la cima
El informe elaborado por los agentes de Medio Ambiente a raíz de la inspección del 21 de enero constata la detección de movimientos de tierra en la Serra d'Alfàbia con una máquina excavadora para habilitar un camino que no contaba con licencia, por lo que instaron a los obreros a cesar los trabajos.
Posteriormente, los agentes observaron como en la parcela que cuenta con una licencia municipal para construir un chalé con piscina se habían producido perforaciones para la instalación de un cable de acero y había "otros materiales de obra".
El agente comprobó que a este lugar no llega ningún camino, y que la intención de la promotora, que en el citado informe aparece con el nombre de la sociedad Marval Five S. L., era la de abrir una ruta nueva hasta la zona de obras, lo que provocaría "impacto sobre el terreno y el paisaje". En el proyecto existe un trazado de camino de acceso a la zona de construcción, pero es "irrealizable" por las dificultades técnicas.
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