Los socios del pacto de gobierno del ayuntamiento de Sóller han dado por superado el enfrentamiento que han protagonizado recientemente después de que concejales de Més acusaran al PSOE de favorecer a algunos funcionarios afines subiéndoles el sueldo con pluses de productividad. Esta situación también fue criticada por el Partido Popular, que acusó a los socialistas de "nepotismo".

A puerta cerrada

Los dos partidos se reunieron este martes a puerta cerrada para analizar la crisis de confianza que se abrió en el seno del equipo de gobierno después de que Laura Celià y Catalina Esteva (ambas de Més) acusaran a los socialistas de promover subidas de sueldo "arbitrarias" y "sin consenso" a algunos funcionarios del Ayuntamiento.

Incluso las dos concejalas se mostraron críticas con el alcalde de su propio partido, Jaume Servera, que aprobó las asignaciones extra a estos trabajadores municipales. Celià y Esteva recibieron una reprimenda por parte de las altas esferas de Més por haber criticado a Servera y a los socialistas.

Laura Celià

Después de la reunión del martes en la que supuestamente se cerró el conflicto, Laura Celià aseguró que "la reunión había ido bien" ya que "hay voluntad de ambas partes de seguir trabajando juntos para dar cumplimiento a los acuerdos de gobierno".

Ningún otro concejal del pacto de gobierno de Sóller se pronunció al respecto. La crisis dentro de Més podría ser una de las causas por la que Catalina Esteva haya decidido abandonar la política en primera línea al finalizar la legislatura.