La plaza de Binissalem se ha transformado este fin de semana en un gran espacio expositivo de piezas artísticas elaboradas con piedra, un material con historia en la industria local del municipio del Raiguer. La XV edición de la Fira de la Pedra i el Producte Local ha registrado un buen éxito de asistencia a pesar del día nublado de hoy. Se trata de un evento comercial que tiene en la piedra su principal nexo de unión, pero que ofrece otros atractivos aptos para toda la familia.

Después de tres lustros, la feria está más que consolidada y explora nuevos territorios como una particular fusión entre el arte de la piedra y la gastronomía, que durante todo el fin de semana ha ofrecido los mejores platos de alta cocina. Hoy, los chefs Andrés Benítez y Miquel Calent han elaborado algunas creaciones culinarias que han podido ser degustadas por 4,5 euros más una copa de vino local.

La jornada de hoy se ha iniciado con un pasacalles en el que han participado los gigantes y los cabezudos de Binissalem. Los más pequeños han podido disfrutar de cuentacuentos y otros espectáculos. Ya por la tarde están previstas demostraciones de ´ball de bot´. Los niños y niñas también se lo han pasado en grande en el parque de sa Rectoria, donde se han instalado varios juegos. En el exterior, un grupo de personas aprendía a elaborar hierbas mallorquinas.

La feria también ofreció numerosas actividades en la jornada del sábado, cuando se llevó a cabo un itinerario patrimonial por un celler de la localidad, además de otros talleres. La feria de Binissalem ha demostrado un año más que no solo de vino vive el municipio del Raiguer.