La indiscutible mejora que representa el proyecto de electrificación del tren en Mallorca se topa con un llamativo caso en la comarca del Pla. El viejo apeadero de Sant Joan, a tres kilómetros del pueblo y, en realidad, en el municipio de Sineu, está cerrado pese a que su rehabilitación, llevada a cabo hace pocos años, costó alrededor de 1.200.000 euros. Ahora, a causa de la mencionada ambiciosa y demandada electrificación, sobresalen las obras de una visible construcción a escasos metros del ignorado apeadero.

Vecinos de Sant Joan lamentan los perjuicios que tienen al no poder disponer de una estación en activo. La rehabilitación fue inaugurada en abril de 2005, habiendo en el poder el Govern Matas. Se destacó entonces que el tren parararía 28 veces al día y que habría amplio espacio para estacionamiento de vehículos y un pequeño autocar (bus lanzadera) para transportar a los pasajeros desde la vía hasta el centro de Sant Joan.

No obstante, en la pasada legislatura 2011-15, el Govern Bauzá (contando entre sus consejeros con el santjoaner Biel Company) sentenció a la pequeña estación.

Residentes se sienten discriminados (tampoco se dispone de un bus exclusivo como el que tiene Montuïri desde hace años) y reivindican la reapertura y reimplantación del bus lanzadera y servicio de bicis.

Pasos inferiores inundados

Precisamente hoy, cargos del Govern y de diversos consistorios tienen previsto visitar las obras de electrificación del tren y las nuevas subestaciones de Llubí y Manacor. Residentes en Sant Joan también les instan a que vean los pasos inferiores inundados de la zona del abandonado apeadero.