El litoral de Calvià se queda sin parques flotantes de juegos. El gobierno municipal (PSOE-SSPC) ha rescindido definitivamente el contrato de concesión para instalar estas estructuras en siete playas del municipio, por incumplimientos "graves" en la gestión. El contrato se adjudicó en julio de 2014, por un periodo de 10 años, pero ahora queda sin efecto.
La decisión la adoptó la Junta de Gobierno el pasado 3 de octubre, donde se comunicó que el Consell Consultiu le había dado la razón al Consistorio en el expediente iniciado a principios de año para finiquitar estas concesiones. El dictamen del Consultiu, según informaron ayer fuentes municipales, respaldó la tesis de que se había producido un "incumplimiento grave imputable a la contratista de obligaciones contractuales de carácter esencial".
Las playas donde ya no habrá parques flotantes de juegos son las de Son Maties, Palmanova, es Carregador, Oratori de Portals Nous, Palmira, Torà (Peguera) y un sector de la de Magaluf (Magaluf I). Estos siete arenales forman parte del paquete de nueve estructuras de juegos cuyas concesiones otorgó la anterior administración popular en el año 2014, por un importe total de 409.975 euros y un periodo de explotación de una década.
Dos empresas se hicieron entonces con las adjudicaciones. Una de ellas consiguió siete (los que ahora se han rescindido), mientras que la otra compañía obtuvo dos, para la playa grande de Santa Ponça y para otro sector de la playa de Magaluf. En este último caso, los permisos no se llegaron a materializar y, de hecho, nunca se instalaron juegos flotantes en estos dos puntos del litoral calvianer. Todo ello hace que el término se haya quedado sin este tipo de oferta de ocio en sus playas, en lo que se refiere a la esfera de la competencia municipal.
Estos parques flotantes contaban con juegos diversos, desde camas elásticas a trampolines, pasando por toboganes. Para acceder a ellos, había que pagar una entrada.