La entidad local menor de Palmanyola ha empezado esta semana a usar un escudo propio diferente al oficial de Bunyola.

El equipo de gobierno encabezado por el alcalde pedáneo, Ramón Oliver, presentó a la junta vecinal celebrada el pasado martes el nuevo emblema de la institución, creado a partir del escudo de armas de Nunyo Sanç, conde del Rosselló y la Cerdanya, uno de los magnates que participaron en la Conquista catalana de 1229 y a quien, en el Repartiment, correspondieron las tierras del antiguo distrito musulmán de Bunyula-Musu, que comprendía los actuales municipios de Bunyola, Valldemossa, Esporles, Deià y parte de Banyalbufar.

El escudo está formado por tres barras de la senyera rodeadas de ocho calderos, el emblema de la casa condal de Nunyo Sanç y que, según algunas interpretaciones, son símbolo de abundancia.

La historia de este escudo se remonta a 1993. El 17 de junio de ese año la junta vecinal ya aprobó iniciar el expediente para dotar a la entidad local menor de Palmanyola de un emblema propio. En ese momento se solicitó un informe a la Conselleria de Cultura y se aprobó instituir el nuevo emblema con la base histórica del escudo de armas de Nunyo Sanç, a quien, como señor de Bunyola, correspondieron también los terrenos en los que actualmente se asienta Palmanyola, pertenecientes a la antigua possessió de sa Font Seca.

Ramón Oliver justifica la entrada en vigor del nuevo emblema porque "el PP lo llevaba en el programa electoral de las pasadas elecciones".El alcalde pedáneo explica que cuando quisieron iniciar los trámites para dotar a Palmanyola de escudo propio se dieron cuenta de que en 1993 ya se había aprobado su creación y se habían realizado todos los trámites pertinentes, incluso la publicación de la resolución en el BOIB, aunque el nuevo escudo no llegó a usarse nunca.

"Ahora hemos retomado el tema, lo presentamos el martes a la junta vecinal y a partir de este momento todos los documentos oficiales ya llevarán el nuevo escudo", afirma Oliver, que justifica su uso por el hecho de que los palmanyolins se consideran "un pueblo con una peculiaridad especial".

Por eso, según el alcalde pedáneo, el escudo pretende ser también un elemento que muestre "unas características que son propias de Palmanyola" y que diferencian el núcleo del resto del municipio y de otros pueblos de la isla.